La municipalización del transporte y de la JMAS

“Recientemente, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar expuso en el Cabildo que ante el grave problema que existe con el transporte en esta frontera, debería pasar al Municipio”

Debido a su proximidad con la población, los municipios son los primeros en identificar las necesidades para mejorar la atención en los servicios públicos. Pero no siempre sucede así, particularmente en Ciudad Juárez con la administración del transporte y el agua potable.

Recientemente, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar expuso en el Cabildo que ante el grave problema que existe con el transporte en esta frontera, debería pasar al Municipio. Datos del Inegi señalan que únicamente el 12 por ciento de los juarenses que requieren movilizarse lo hacen a bordo de ruteras o en el semimasivo.

Muchos usuarios prefieren invertir más recursos, que deberían ser destinados para el hogar o la educación de sus hijos, y se movilizan a través de autos de servicios de plataforma, impactando a la economía familiar, simplemente porque en muchas colonias de la ciudad, los camiones han abandonado el servicio.

El año pasado, el Consejo Consultivo de Transporte, dependiente del Gobierno del Estado, autorizó un incremento a la tarifa del servicio, que pasó de 8 a 12 pesos, para lo que los concesionarios se comprometieron a implementar varios cambios, como la renovación del 100 por ciento de la flotilla de camiones de transporte, instalación de GPS y capacitación de sus choferes. No han querido o no han podido cumplir con los juarenses.

Ahora se ha asegurado que ya vienen los camiones nuevos, pero que solo son algunos, y sucede justo cuando está a punto de empezar un proceso electoral, lo que parece algo hecho al vapor por parte de las autoridades estatales, ya que se acercan las elecciones. Esperemos que no sea esa su intención.

Otro servicio con el que luchan los juarenses es el que ofrece la Junta Municipal de Agua y Saneamiento, que paradójicamente, no es municipal, sino estatal. Los habitantes de esta ciudad padecen fugas en sus colonias, cobros excesivos y a veces una falta de atención muy grande.

Para nadie es un secreto que a la JMAS se le ha llegado a utilizar como una “caja chica”; incluso, ha habido varias investigaciones en torno a este tema. ¿Control político o administrativo? ¿Servicio público utilizado con fines electorales? ¿Por qué las autoridades se han negado sistemáticamente a entregarlo a las autoridades locales?

La municipalización de los servicios públicos es vital para garantizar eficiencia y cercanía en la gestión. Al descentralizar responsabilidades, las autoridades locales pueden adaptar los servicios a las necesidades específicas de los juarenses, promoviendo una mayor participación ciudadana y transparencia en la administración. Esto fortalece la gobernanza local y fomenta un desarrollo más equitativo y sostenible.

Estos temas deben abordarse a fondo, con el fin de mejorar la calidad de vida de los juarenses. Se requiere analizarlos para llegar a un acuerdo en favor de las familias de nuestra querida ciudad.