Diario
Estados Unidos
domingo, 29 septiembre 2019 | 18:31
California — El Condado de Orange fue el epicentro de la toma de posesión demócrata de la Cámara de Representantes en el 2018, donde los republicanos perdieron cuatro escaños en lo que alguna vez fue el corazón del conservadurismo de Ronald Reagan en California.
El sábado por la noche, cuando tres de los demócratas victoriosos fueron honrados en una cena política anual, una nueva batalla estaba en la mente de todos: cómo proteger esos escaños ganados en el 2020 al mismo tiempo que se vende a votantes la idea de investigación de juicio político contra presidente Trump.
En la cena, el representante, Harley Rouda, advirtió a los demócratas que no “nos sentemos en nuestros laureles”.
El representante Mike Levin dijo solemnemente que “los tiempos nos han encontrado”. Y el representante, Gil Cisneros, quien sólo se presentó para la indagatoria la semana pasada, comentó en dos ocasiones en su sitio web para pedir donaciones y señaló: “Los republicanos vienen por mí ahora”.
Un complicado acto de equilibrismo ha sido puesto en marcha para los demócratas de la Cámara de Representantes, ahora que regresan a sus distritos para un receso de dos semanas que resultará ser un momento crucial para enmarcar un debate de costa a costa sobre el juicio político y las prioridades de la nación.
A pesar de que las encuestas mostraron que más estadounidenses están a favor de una investigación de juicio político, los votantes hablaron principalmente sobre temas como el cuidado de la salud y la economía durante el fin de semana en las reuniones del ayuntamiento y reuniones del partido con los demócratas de la Cámara.
Dichos miembros, especialmente en los distritos indecisos, respondieron destacando los logros y objetivos de sus políticas —al mismo tiempo que intentaban moldear la opinión pública sobre el juicio político y preparar a los votantes para próximos ataques de los republicanos.