Crece angustia; 92 horas sin Rubí

Chihuahua— A casi 4 días de la desaparición de la niña Brenda Rubí Rubio Insunza, presuntamente sustraída por un indocumentado de origen hondureño, la angustia de la familia crece y las autoridades mantienen operativos en varios puntos de la ciudad en busca de datos que conlleven a la localización de la pequeña de 12 años de edad, que desapareció poco después de las 3 de la tarde en la colonia Punta Oriente, justo el día de la celebración de las madres.

Un grupo de agentes ministeriales acudieron esta mañana a dicha colonia para efectuar diligencias y  recabar mayor información para fortalecer las indagatorias abiertas a raíz de la denuncia por desaparición que interpusieron los padres de Rubí, Edgar y Virginia, los cuales identifican como presunto responsable al hondureño Erick Barrera, quien a principios de este año invadió una de las muchas viviendas deshabitadas del sector.

Cinco días antes de la desaparición, Erick, hizo contacto con la familia y poco a poco se gano la confianza del matrimonio. El 10 de mayo le pidió a Virginia autorización para que Rubí lo acompañara a comprar comida a un local cercano y nunca regresaron.

De acuerdo a los protocolos que se ponen en marcha cuando se presenta un caso de desaparición de un menor de edad, las primeras 72 horas suelen ser vitales para su ubicación con mínimos daños, pasado ese lapso crecen los riesgos de afectación a la integridad física del desaparecido.

Rubí fue descrita por su padre como una niña cariñosa y amigable y la familia continua solicitando el apoyo de los chihuahuenses para que regrese con bien a casa.