Diario
Vamos
miércoles, 20 mayo 2020 | 18:33
Ciudad de México— La pandemia del coronavirus Covid-19 ha hecho que revaloremos varios aspectos de la vida.
Esas historias que han recorrido el mundo acerca del agua cristalina con peces en los canales venecianos, del melódico trinar de las aves en el Centro Histórico de la Ciudad de México o del resurgimiento son una invitación a cuidar más y mejor del entorno.
Eso, justo es lo que hace la UNESCO a través de su prestigiosa lista del Patrimonio de la Humanidad.
"El Patrimonio es el futuro de todas las naciones. Da identidad, es nuestra espiritualidad, especialmente en Mesoamérica, que es lo sagrado, lo cosmogónico.
"Y la grandísima lección que nos está dando el coronavirus es que todos los lugares deben aplicar los planes de manejo filológico, es decir tomando en cuenta su historia y evolución para que su legado cultural o natural continúe", dice Saúl Alcántara, presidente de ICOMOS Mexicano, organismo no gubernamental asesor para el Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Busca proteger, preservar y dar a conocer "el valor universal excepcional" de lugares naturales y culturales, así como de tradiciones y costumbres alrededor del mundo.
Actualmente, de acuerdo con el portal oficial de la UNESCO, el Patrimonio de la Humanidad está integrado por un total de mil 121 sitios, de los cuales 869 son culturales, 213 naturales y 39 mixtos,distribuidos en 167 países.
Italia, China, España, Alemania, Francia, India y México, en ese orden, lideran la lista.
De esos, 53 están considerados "en riesgo" y sólo dos han quedado fuera de la lista: el Santuario del Órix Árabe, en Omán, en 2007 y el Valle del Elba en Dresde, Alemania, en 2009.
La lista reúne los más hermosos rincones de este planeta, desde sitios arqueológicos, como los de Aigai, Delfos, Filipos, Mistras y Olimpia, en Grecia; conjuntos arquitectónicos como el de Borobudur, en Indonesia; magnas catedrales alemanas, como la de Aquisgrán, Naumburgo o Espira, hasta increíbles parajes naturales, como las Islas Galápagos, en Ecuador; el parque de Los Glaciares, en Argentina o los santuarios del panda gigante de Sichuán, China.
Estos representan apenas unos cuantos sitios en los que, en cuanto se pueda viajar otra vez, seguramente querrás respirar profundamente, sin preocupaciones.
Toma nota
La lista tiene sus raíces hacia 1959, cuando se realizó una campaña internacional para recaudar fondos para salvar el templo de Abu Simbel, al sur de Egipto, pues estaba en riesgo de quedar bajo el agua con la construcción de la presa de Asuán.
Varios años después, se trasladó, piedra a piedra a un terreno seguro, en lo alto y lejos del agua, y hasta la fecha es uno de los parajes turísticos más visitados de esa nación. Ya para 1979 se convirtió en uno de los primeros Patrimonios Culturales de la Humanidad.
El Patrimonio Cultural de la Humanidad integra la mayor parte de la lista de la UNESCO, y uno de los más hermosos es Angkor, en Camboya, sitio arqueológico con una extensión de 400 kilómetros cuadrados en el que se están los vestigios del Imperio Jémer.
¿Y México? Tiene 27 sitios inscritos en esta categoría, entre ellos los centros históricos de Campeche, la Ciudad de México, Guanajuato, Morelia, Oaxaca, Puebla y Zacatecas.
Desde 1981, la Gran Barrera de Coral de Australia es Patrimonio Natural de la Humanidad. Es el conjunto de arrecifes coralinos más extenso del planeta, con 400 tipos de coral, mil 500 especies de peces y 4 mil variedades de moluscos.
Nuestro País cuenta con seis sitios inscritos en esta categoría, entre ellos la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca (Estado de México y Michoacán), el Archipiélago de Revillagigedo (Colima), el santuario de ballenas El Vizcaíno (Baja California Sur) y Sian Ka'an (Quintana Roo).
Por otro lado, Meteora, Grecia, quedó inscrito en 1988 como Patrimonio Mixto de la Humanidad porque en los Valles de Tesalia se elevan enormes pilares de piedra arenisca, coronados con monasterios anacoretas construidos desde el siglo 11. Los frescos del siglo 16 que decoran las paredes de algunos resultan un hito en la historia de la pintura posbizantina.
Y el paisaje se cree que empezó a formarse hace 60 millones de años por la erosión constante del río Tesalia.
México presume dos sitios en esta categoría: la Antigua Ciudad Maya y los bosques tropicales protegidos de Calakmul (Campeche) y el Valle de Tehuacán-Cuicatlán: hábitat originario de Mesoamérica (Puebla).
La tradición argentina y uruguaya del tango quedó inscrita en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2009. Surgió en la cuenta del Río de la Plata, entre las clases populares de la ciudades de Buenos Aires y Montevideo por una amalgama de costumbres, creencias y ritos de migrantes europeos, descendientes de esclavos africanos y nativos (criollos). Para vivir la experiencia del tango están las milongas, es decir salas de baile tradicionales.
Hay otros ritmos considerados en esta categoría: el fado de Portugal, la pirekua y el mariachi de México, la bachata y el merengue de República Dominicana, el canto de Sana'a de Yemén, el candombe de Uruguay, el shashmaqom de Uzbekistán, por mencionar sólo algunos.
TODO UN TESORO
En esta lista también se protege a danzas, rituales y tradiciones artesanales.
México tiene un total de 11 Patrimonios Culturales Inmateriales, entre las fiestas tradicionales de Día de Muertos y los Parachicos, la gastronomía mexicana, la charrería y las ceremonias rituales de los voladores de Papantla y la de la Virgen de Zapopan. La fabricación de la cerámica de Talavera es un título compartido con España.