Diario
Juárez
domingo, 10 febrero 2019 | 11:05
Ciudad Juárez.- Autoridades penitenciarias confirmaron este domingo que el sacerdote Aristeo Baca se encuentra recluido en el área de Ingresos del Cereso Estatal 3 de esta Ciudad vistiendo el uniforme de interno, consistente en pantalonera, camiseta gris y zapatos tenis sin cintas.
En este apartado convive con otros recién llegados al penal por diferentes delitos que no han sido evaluados para su traslado a cualquiera de los cinco módulos de esa cárcel, donde interactuaría con el resto de los reos.
El sacerdote ordinariamente oficiaba misa los domingos en la iglesia de Santa María de la Montaña, que se localiza en las proximidades de la penitenciaria, a donde ingresó desde ayer acusado por delitos de índole sexual contra una menor de edad.
“Aristeo Baca es y será tratado como cualquier otro interno” comentó uno de los responsables del Centro de Readaptación Social para Adultos, que por protocolos internos solicitó no publicar su nombre debido a lo delicado del caso.
Indicó que el sacerdote deberá de permanecer en Ingresos al menos hasta su audiencia de vinculación o no a proceso programada para el jueves de la próxima semana.
La ropa que vestía al momento en que llegó al Cereso se le guarda y podría utilizarla si considera conveniente para presentarse ante el juez el día 14 de febrero, se aseguró.
Luego, y de ser necesario, el personal del Centro de Observación Clasificada del penal le tendría que hacer una evaluación psicológica y física para determinar en qué patio o modulo es conveniente su permanencia, en el caso de que el proceso judicial así lo determine, según se informó.
El padre, reconocido localmente por sus obras altruistas, tiene acceso de visita restringida si la persona que se designe se hace acompañar del abogado, se aseguró.