Buscan nuevo juicio para judío sentenciado a pena de muerte

Texas.- En su juicio por asesinato capital, Randy Halprin enfatizó que si bien llevaba un arma con él después de escapar de una prisión en Texas con otros seis fugitivos, él no mató a un oficial de la Policía durante un robo que desencadenó una persecución por todo el país, publicó The Washington Post.

“No tenía la intención de matar ese oficial. No le disparé. No saqué mi arma”, dijo Halprin en el 2003 sobre el tiroteo fatal en Irbre, Texas, del oficial de la Policía Aubrey Hawkins en una tienda de artículos deportivos en vísperas de Navidad del año 2000. “No esperaba que alguien muriera”.

Halprin, que cumplía una condena de 30 años por agresión agravada contra un menor antes de huir con una pandilla de siete fugitivos de la prisión en Texas, fue declarado culpable días después de su testimonio, y no pasó mucho tiempo para que el juez de distrito Vickers “Vic” Cunningham, del condado de Dallas lo sentenciara a muerte. Pero cuando a Halprin se le impuso la pena capital, el juez que lo envió al pabellón de la muerte supuestamente se refirió a él con un insulto antisemita y como “ese p— judío”, mientras agregaba que los judíos “necesitaban ser eliminados porque controlaban todo el dinero”.

Y no se detuvo ahí. Tal como lo reveló el Dallas Morning News el año pasado, la familia de Cunningham lo describió como un “racista de toda la vida” que usaba regularmente lenguaje ofensivo hacia los afroamericanos e hispanos e incluso estableció un fideicomiso para sus hijos que les daría dinero solo si se casaban con otra persona anglosajona.

El jueves, los abogados de Halprin presentaron una notificación solicitando que su cliente de 41 años, que está programado para ser ejecutado el 10 de octubre, reciba un nuevo juicio. Ellos sostienen que el derecho constitucional de Halprin al debido proceso fue violado debido a los supuestos puntos de vista antisemitas de Cunningham, diciendo que “albergaba ánimos y prejuicios profundamente arraigados sobre personas que no eran anglosajonas ni cristianas”. Además de la notificación enviada al condado de Dallas y al tribunal de apelaciones del estado, más de 100 abogados judíos de Texas presentaron un escrito de amicus en apoyo a que Halprin reciba un nuevo juicio. (Liga Anti-Difamación también rindió su apoyo).

“Si el juez Cunningham es el intolerante descrito en la solicitud, entonces todavía no se ha llevado a cabo un juicio justo”, según escribieron los abogados judíos.

Cunningham, de 57 años, niega las acusaciones, que se presentaron en una apelación en la primavera, en base a entrevistas recientes con asociados. No respondió a una solicitud para dar un comentario el jueves por la noche, pero Cunningham le aseguró al Morning News que no era un antisemita ni un racista.