Diario
Associated Press
Washington.- El secretario de Estado Mike Pompeo desestimó el miércoles las declaraciones de testigos de que él sabía que el gobierno de Donald Trump quería presionar a Ucrania para que investigue a políticos estadounidenses.
Pompeo, en una reunión de ministros de exteriores de la OTAN en Bruselas, dijo que no vio las audiencias del embajador estadounidense ante la Unión Europea Gordon Sondland.
Aun así aseveró que está orgulloso del trabajo de la administración en Ucrania y que la apoya totalmente.
Aseguró que el gobierno de Donald Trump ha fortalecido sus lazos con Ucrania y le ha dado material bélico necesario para defenderse de la agresión rusa.
Pompeo afirmó que no se recusará del proceso de entregar documentos del Departamento de Estado a la comisión de la Cámara de Representantes que lleva a cabo la pesquisa sobre Trump. La comisión ha denunciado que el gobierno de Trump no le ha entregado ni un solo documento.
Por otra parte, el Departamento de Energía negó que el secretario de Energía Rick Perry estaba al tanto del plan del presidente Donald Trump de presionar a Ucrania para que investigue a políticos rivales.
La portavoz del departamento, Shaylyn Hynes, negó lo dicho por el embajador estadounidense ante la Unión Europea Gordon Sondland en su testimonio ante la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes.
Sondland dijo que el abogado de Trump, Rudy Giuliani, le participó a Perry que Trump deseaba que Ucrania declarara públicamente que investigaría a una empresa ucraniana en cuya junta directiva estaba el hijo del ex vicepresidente Joe Biden.
El Departamento de Energía afirmó que Perry no se había enterado del tema antes de que se hizo pública la conversación telefónica entre Trump y el presidente ucraniano. Hynes dijo que Perry habló con Giuliani solo una vez, a pedido de Trump.
Hasta ahora Perry se ha negado a comparecer ante la comisión.