Diario
El Paso
miércoles, 10 julio 2019 | 06:00
Los Angeles, CA- El entrenador de futbol americano de la preparatoria Hanks en El Paso se volvió la sensación del momento tras intentar mediar en una pelea en el parque de Disneyland.
Jason Blair se encontraba disfrutando de unas vacaciones en dicho parque de diversiones el pasado fin de semana cuando se desato una pelea en entre una familia.
Los hechos fueron captados por medio de una cámara y el video se volvió viral en internet y las redes sociales.
La pelea comenzó frente al área de Mickey’s Toontown luego de que una mujer le escupiera en la cara a su hermano.
El Paseño Blair se percató de lo que estaba sucediendo y su primer instinto fue ayudar a separar a la mujer que estaba siendo atacada por el hombre.
“Si esas personas iban o no a pelear, estuvo muy mal que el hombre le pegara a la mujer y eso no se hace,” dijo Blair
Al ver la pelea frente a sus ojos lo primero que hizo Blair fue asegurarse de que su esposa y su hija estuvieran a salvo para luego proceder y ayudar.
“Solo hay una pequeña ventana de tiempo para poder ayudar, a mi no me educaron de esa manera, yo siempre les digo a mis jugadoras que nunca se dejen pegar por un hombre” señalo Blair.
Blair, quien no estuvo involucrado de manera directa en la pelea intervino cuando un hombre afroamericano comenzó a pegarle a una mujer.
En el video se puede escuchar como Blair le pide al afroamericano que tome sus cosas y se retire.
La pelea solo empeoró, luego de que lograran separar a al afroamericano de la mujer, este en otro momento se fue contra otra mujer y la agredió a golpes.
Elementos de la Policía del Disneyland arribaron después de que terminara la pelea y los miembros de familia involucrados en la pelea fueron escoltados a las afueras luego de que no quisieran colaborar con las autoridades.
“Cualquier tipo de violencia es inexcusable y no será tolerada,” declaro Liz Jaeger portavoz de Disneyland por medio de un correo electrónico.
También dijo que aquellos que se vieron involucrados fueron escoltados a las afueras del parque y entregados al Departamento de Policía de Anaheim.