Sella vuelta al rojo con apretón de manos

-Sella vuelta al rojo con apretón de manos

-Ya son más de 6 mil 500 los decesos

-Video: Calderonistas revisan desastre financiero

-Al fin hablan oficialmente sobre los ‘300 mil’

El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, extendió durante su gira por Ciudad Juárez prácticamente su visto bueno a Chihuahua para alcanzar el anhelado semáforo epidemiológico verde.

Dijo AMLO el 26 de marzo que Chihuahua estaba “en posibilidades de entrar a semáforo verde”. Las campanas fueron echadas al vuelo, pero la tarde de ese mismo día quedaron activadas las alertas de regresión por el subsecretario de Salud federal, el doctor Hugo López Gatell.

Ambos tenían razón en parte. Medio Chihuahua, del centro hacia el sur, presentaba puntos negativos en dos de sus principales indicadores, los contagios y la ocupación hospitalaria; en la zona fronteriza, particularmente Juárez, traía cero ocupación hospitalaria y “casos” contados con los dedos de la mano.

De esos días en adelante la región centro-sur ascendió con una enorme rapidez en contagios, intubados, ocupación hospitalaria y fallecidos; de 60 contagios hacia arriba y de 10 muertos en adelante.

Ciudad Juárez ha ido subiendo, pero francamente sin comparación con el resto del estado. Alcanzamos ya un promedio de cinco fallecidos y 30 contagios, con un 40 por ciento aproximado de la población estatal.

Es altamente posible que llegue un semáforo rojo para Chihuahua, centro y sur; y en el mejor de los casos un naranja casi rojo para Juárez.

Tenemos en versión digital una fotografía de Javier Corral saludando efusivo de mano a un líder empresarial de Juárez en evento del lunes por la tarde.

Ninguna sana distancia. Más que mal ejemplo, una violación a las reglas de salud publicitadas por el Gobierno estatal. Fue inclusive el gobernador “modelo” en un anuncio para aconsejar las formas de saludo “en la nueva normalidad”. Ninguna contempla el apretón de manos.

Ese representa un diminuto botón de muestra que explica la nueva crisis de Covid-19 para Chihuahua por aquello que fue advertido como la “tercera ola”.

En ningún momento el Gobierno estatal ha ido a la cabeza en las estrategias ni para contener la epidemia ni para enfrentarla. Tanto Corral y su secretario de Salud, Eduardo “El Higadito” Fernández Herrera, solo han sido voceros de las estadísticas generadas en los hospitales.

No han sido nunca los líderes de un auténtico Consejo Estatal de Salud; no son las autoridades en quienes los chihuahuenses hayan depositado su confianza para superar los constantes momentos críticos y dejarlos atrás.

Esa es la realidad.

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Precisamente el portavoz en tercer grado de la pandemia y director médico de la zona norte, Arturo Valenzuela Zorrilla, reportó ayer únicamente tres defunciones y apenas 20 contagios de Covid en la entidad.

Con ello, el estado alcanzó los seis mil 145 muertos por la enfermedad, en la antesala justo del nuevo semáforo rojo con el que amenazan Javier Corral y los funcionarios de la Secretaría de Salud para esta semana.

Pero el personal de Salud estatal manda un comparativo demoledor. Son las cifras de ayer dadas por Zorrilla y las reportadas la noche del lunes 19 de abril en Palacio Nacional. Es enorme la diferencia, pues la Federación asienta seis mil 494 muertos. La imagen en versión digital de La Columna.

Cero lógica y coordinación entre niveles de gobierno. Ni en el conteo de muertos se ponen de acuerdo, como tampoco hay sincronía en la medición de la ocupación hospitalaria y menos en la dinámica de dispersión del virus.

Ni a quién creerle, pues el sistema interno donde Chihuahua contabiliza sus casos reales, más allá de cómo se administran, dosifican y difunden, supera los seis mil 500 decesos.

Esto es prueba, nuevamente, de que no hay criterios reales, lógicos y congruentes en la semaforización, como tampoco hay capacidad en algo tan básico como la epidemiología, especialidad que cada ente, estatal o federal, lleva por su cuenta.

Sobre esta realidad es que se habrán de tomar decisiones de política sanitaria que habrán de abonar a la gravedad de la emergencia, en vez de servir para lo opuesto.

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Más allá de la campaña y los contratiempos jurídicos, al equipo de la candidata del PAN a la gubernatura, Maru Campos, acaban de sumarse los calderonistas para el armado de un plan de gobierno en materia de finanzas públicas.

La tarea específica que tienen asignada los tecnócratas es revisar la situación financiera del estado; sobra decir que está ahogado en deudas, tanto de largo de plazo como contingentes y con los proveedores.

No hay muchas sorpresas en lo que han encontrado hasta la fecha. Una revisión somera de los estados financieros mensuales y anuales basta para ver la proporción del déficit en aumento igual que la mala condición crediticia que entregará la gestión de Javier Corral.

Lo novedoso sería que encontraran alternativas para reorganizar un estado prácticamente en la quiebra, como creen que habrán de hacerlo a partir de septiembre.

Esa es la misión que tienen: aparte de diagnosticar, lo que es sencillo en apariencia, buscar opciones de salvación en un entorno complejo de crisis económica y sanitaria, aderezada con el olvido federal y la ineficiencia administrativa estatal.

Tiene varios mensajes el apoyo que brindan al proyecto de Campos Galván los exfuncionarios del gobierno de Felipe Calderón y el mismo expresidente alejado del PAN.

Por un lado le apuestan esos panistas o expanistas, porque hay de todo, a conquistar el lejano estado norteño y construir desde aquí nuevos caminos para regresar al Poder Federal. La reconquista de México, lo ha llamado la propia abanderada.

Por otro, la alcaldesa con licencia de la capital no se duerme en sus laureles esperando a ver si gana o si la dejan pasar los tribunales, así que desde ahora arma un plan de lo que podría ser su administración en unos meses. Hace bien para no llegar en ceros, en caso de ganar, a ver qué se le ocurre.

Esta es la forma en que el equipo de Campos construye la propuesta en materia financiera, que seguramente llenará su discurso en próximos días, sobre todo con el sector empresarial, que tiene en puerta varios debates en Chihuahua y Juárez.

Ayer estuvo ella en esta frontera. Pudo pasar un mal momento porque coincidió su presencia en el mismo salón de eventos sociales donde Javier Corral asistía como invitado al cambio de mesa directiva de Coparmex (tenemos en digital video de la propaganda que debió ser vista por el gobernador), pero solo se concentró Maru en lo suyo y adiós al mal genio de su perseguidor. “Si lo veo solo lo saludo”, le dijo a los chicos de la prensa.

Campos Galván tuvo buen acto con la comunidad evangélica de la ciudad. Fue acompañada por su infaltable mano derecha en esta frontera, el candidato a la alcaldía, Javier González Mocken.

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Más que obvio el gato encerrado en el asunto que hemos abordado aquí lunes y martes, el de la detención de una pareja y el aseguramiento de una calibre nueve milímetros y “300 mil dólares”.

La detención por parte de agentes estatales fue desde el viernes, pero hasta ayer quedó oficializada la operación por parte del secretario de Seguridad Pública, Emilio García Ruiz. Dijo que el arrestado, Julio C., fue entregado a la SEIDO, quien lo trasladó al centro del país.

Admitió el funcionario estatal también que hay investigación interna para conocer detalles del operativo llevado a cabo para esa detención por parte de los estatales.

Fueron entregados 300 mil dólares... pero falta la mitad, se ha dicho.

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El líder sindical del Cobach, Bernardo Hernández, iniciará hoy un recorrido por los planteles del estado, supuestamente para decirle a sus agremiados cuáles son las mejores ofertas partidistas en estos momentos en contienda.

El arranque de estos recorridos será en Juárez. Bernardo Hernández, dicen los mismos agremiados, trae visto bueno de Morena para sumar lo más posible al proyecto de Juan Carlos Loera.

Algunos maestros y empleados de Bachilleres se han parado de pestañas porque el propio Hernández declaró al sindicato apolítico hace cuatro años; inclusive prometió alejarse de la grilla partidista.

Pues el líder Bernardo ya olvidó aquello y este día empieza el recorrido por los planteles de Juárez, de manera virtual o presencial, para acercarle votos a Juan Carlos.

A ver si pega.