Políticas responsables, no espias

El panorama político-electoral que vivimos actualmente es, entre otras muchas cosas, la oportunidad de administrar mejor los recursos públicos y con ello, crear mejores y más evolucionados escenarios de vida para los ciudadanos que habitamos en este país.

Nuestras ciudades carecen de mucho, desde banquetas para que puedan andar los peatones, hasta planes tecnológicos y de administración pública que redefinan la estructura organizacional para vincularnos de mejor forma el gobierno y la ciudadanía. Estoy convencida que juntos es que debemos darle un verdadero rumbo de gobernanza a nuestras comunidades.  

En estos tiempos es importante darse cuenta que el gobierno ya no es el gran diseñador de la cosa pública, pues la sociedad ha tenido un gran avance en temas tecnológicos que han servido para organizarse independientemente de las estrategias estatales, demostrando de esta forma que hoy por hoy, el diseño de la agenda pública es y debe ser compartida con sociedad civil organizada, la academia y las empresas, pues si bien es cierto que el Estado no debe perder independencia en el tema pues es quien gestiona la organización administrativa, al final es un diseño compartido que nace de una necesidad natural de generar estrategias que comprendan más a la sociedad a través de la tecnología para generar valor público a través de procesos modernos de innovación tecnológica. 

Como ejemplo de lo anterior les puedo comentar sobre “Violetta”, que es una plataforma digital creada por estudiantes universitarias, donde se ofrece ayuda y soporte profesional para identificar relaciones violentas, con la finalidad de evitar más casos de violencia de género que afectan tanto a nivel emocional como físico, e incluso, sirve para prevenir feminicidios que desafortunadamente se presentan cada vez más en Mexico.

La propuesta política de quien pretenda gobernar debe ir en este sentido, con políticas cercanas a la gente y nacidas desde sus necesidades principales, dando espacio a la ciudadanía de participar en el manejo de su cotidianidad para que se sienta más libre e identificada y, por consiguiente, más comprendida y feliz. La innovación en los métodos debe ir encaminado a las cuestiones sociales y deben ser creados para hacerle la vida más fácil al ciudadano. Además, debemos acercar la tecnología a través de la capacitación a los funcionarios públicos y personas de todas las edades, principalmente adultos mayores; que nadie se quede atrás.

Dentro de este tema de las tecnologías y gobierno, es muy importante entender que el compromiso del Estado debe ser orientar, cuidar y respaldar al ciudadano, no imponerle sistemas de vigilancia que lo espíen o roben sus datos personales para después usar esta información en su contra, pues hay regulaciones que se disfrazan de ayuda y apoyo, pero se utiliza para otros temas incluso criminales.

Desde que apareció el Covid se han impuesto en el mundo una serie de regulaciones que con el pretexto de la cuarentena los gobiernos abusan en el tema de vigilancia y privacidad poniendo en riesgo las libertades civiles y políticas además de otros derechos ciudadanos y eso no lo podemos permitir, debemos exigir siempre garantías de privacidad y seguridad. Apoyar la creación de centros tecnológicos de innovación como los que está haciendo el Gobierno del Estado de Chihuahua es un buen comienzo.

Tenemos que conocer los desafíos de las nuevas tecnologías, pero es una discusión que debe ampliarse, este es un tema que da para mucho de que hablar.

Lo importante es garantizar los derechos fundamentales, y usar la tecnología para nuestro beneficio, no en contra. Gracias por leer, yo soy Daniela González Lara.