Opinión
sábado, 28 marzo 2020 | 11:50
Los juarenses estamos infectados del Coronavirus, ya es muy tarde, lo advirtieron, pero no hicimos caso. La situación por el mundo es bastante grave, ha llegado a nuestra ciudad, alguien la trajo y ahora debemos actuar de forma responsable.
Estoy completamente seguro de que las personas que cargan con el virus estuvieron conscientes de un posible contagio al estar fuera de Ciudad Juárez, a su regreso, estos ambularon irresponsablemente donde grandes grupos de personas normalmente se concentran como los restaurantes, centros comerciales, iglesias, cine, escuelas, etcétera. Durante semanas, las redes sociales estuvieron repletas de información sobre lo que acontece por el mundo (entre ellos los memes). Conforme pasó el tiempo, la gente comprendió la gravedad del problema y empezó a preocuparse, aunque tarde, pero lo hizo.
¿Por qué somos tan incrédulos? Tuvimos el privilegio del tiempo, de hacer las cosas correctamente, pero tenemos una mala costumbre de pensar que ante cualquier situación podremos comprar, combatir y solucionar nuestro tiempo, un ejemplo claro es la impuntualidad, una distorsión social que nos fue heredada desde la conquista de los españoles, por lo que tristemente nos convierte en una sociedad irresponsablemente colectiva. Considero que hemos tenido suficiente tiempo para corregir nuestros malos hábitos ya que la conquista ocurrió hace mucho tiempo. Por lo que estoy convencido que los gobernantes son los principales doctores para diagnosticar los problemas con los que crecimos, son ellos también, los que tienen la obligación de solucionarlos por medio de políticas públicas efectivas, de tal forma, que la ¨responsabilidad social¨ forme parte de nuestra solución día con día, y con responsabilidad me refiero a reaccionar rápido, de forma positiva y colectiva ante un problema como el de COVID-19.
Durante la ultima década, por medio de las redes sociales como el FACEBOOK, los gobiernos han tenido el privilegio de establecer comunicación directa con la gente, pero en esta ocasión no fueron ellos los informantes de cómo prevenir el contagio ante dicha pandemia, fue la propia ciudadanía internacional, estos nos informaron y suplicaron que fuéramos altamente precavidos. Fue por este mismo medio donde un ejecutivo mexicano desde su oficina en Viena, Austria, en la tercera cede más grande del mundo de la ONU, me envió un preocupante mensaje y que por supuesto compartí:
“Querido hermano por favor lee esto con cuidado y comienza a convencer a tus alumnos y comunidad que tienen que empezar YA a tomar precauciones. Austria está entrando en una faceta muy crítica, ciudades pequeñas están bajo cuarentena. A partir de la semana que viene se va a cerrar todo el comercio con excepción de supermercados farmacias y bancos. Cuando leas este texto entenderás el peligro inminente para México.La propagación del coronavirus es exponencial. Austria prevé a fines de la semana que viene más de 10,000 serán infectados.Se calcula que para fin de mayo mínimo el 20% de la población estará infectada.México tiene que tomar medidas drásticas ¡YA!¨
La forma de trabajar de los gobiernos cambió de rumbo, cada vez más somos los ciudadanos los que determinamos y evaluamos el funcionamiento de los recursos públicos, esto es positivo, ya que el servicio público constituye una actividad técnica, regular, continua y uniforme que se realiza para satisfacer las necesidades sociales, económicas, culturales y sanitarias de nosotros el pueblo. Sobre todo, en estos tiempos de crisis donde todo pareciera que alguien nos ataca, donde la mayoría de las personas no entienden qué es lo que pasa, de dónde provienen estos problemas y por qué surgen, lo que convierte a los rumores en los más influyentes y a los informes diario de nuestros gobernantes en un chiste, esto sucede porque los gobiernos no han logrado visualizar con tiempo los problemas venideros, sus estrategias no están a la vanguardia, pero lo estarán.
¿Qué es lo que las personas esperamos del gobierno? A estas alturas del partido, los gobiernos son sumamente indispensables, estos deben de utilizar todos los recursos (disponibles) para tomar las siguientes medidas durante la cuarentena:
1.- Patrullar las calles informando a los peatones sobre el peligro del contagio e invitarlos a irse a casa.
2.- Colaborar con la sociedad comercial organizada para que informen a sus empleados a tomar medidas responsables ante sus empleados y clientes.
3.- Vigilar la actividad de las sucursales bancarias para mantener el orden.
4.- Colaborar con las farmacias y supermercados para que la ciudadanía esté mejor protegida, se realicen compras responsables y no de pánico.
5.- Salvaguardar los hospitales y las instituciones sanitarias para atender los enfermos comunes y ofrecer información sobre el COVID-19.
6.- Tener una línea telefónica abierta o mensajes en redes sociales para dar información relevante y preventiva.
7.- Informar por medio de las redes sociales un plan contingente.
8.- Demostrar eficacia gubernamental.
9.- Invitar a los lideres sociales locales a participar en la reconstrucción social, comercial y sanitaria.
10.- Diseñar políticas públicas efectivas en materia de prevención social.
¿Qué debemos hacer nosotros la gente?
1.- Seamos responsables y no viajar en los próximos días.
2.- Los viajados manténganse en casa.
3.- Evitemos acudir a eventos con más de 5 a 10 personas.
4.- Compremos online.
5.- Compremos físicamente, pero de forma responsable.
6.- Apoya a los negocios locales, ordena su producto por medio de las redes sociales y envía transferencia.
7.- Desinfecta tu casa.
8.- No compartas noticias falsas.
9.- Lávate las manos constantemente
10.- Fomenta la lectura.
Como conclusión, considero que las acciones preventivas por parte de los gobiernos deben urgentemente ser integradas en las agendas públicas y de gobierno, ya que tiene un alto grado de posibilidad para obtener una buena oportunidad de empezar una sana relación con la ciudadanía y posteriormente construir el bienestar que tanto anhelamos. Aprovechemos sociedad y gobierno la oportunidad.