Daños impiden clases en 60 escuelas

Minutos antes de las 9 de la mañana, Andrea, de 5 años, hizo fila afuera del jardín de niños Benito Juárez para ingresar en compañía de su mamá a escuchar la manera en que se impartirán las clases en este ciclo escolar, las cuales no serán de forma presencial en su escuela porque es uno de los planteles afectados por actos de robo y vandalismo. 

De abril del 2020 a junio del 2021 fueron 111 escuelas públicas de nivel básico las que reportaron ante la Subsecretaría de Educación y Deporte algún tipo de robo, además 24 planteles señalaron casos de vandalismo; en consecuencia, alrededor de 60 no pudieron incorporarse al retorno a clases presenciales. 

“El fenómeno que se registró durante la pandemia fue muy distinto a otros años, ahora los robos se cometieron con desmantelamiento muy fuerte de las escuelas, tenemos escuelas en el Centro que les rompieron los techos, que les agujeraron las paredes, cosas que antes no habíamos visto (…) ahora hubo daños importantes que es complicado repararlos rápido”, dijo la titular de la SEyD, Judith Soto.  

En el caso del jardín de niños Benito Juárez, ubicado en la colonia Bellavista, le robaron las líneas de cobre de tres aires acondicionados tipo minisplit. Las instalaciones únicamente cuentan con cuatro grupos pero la falta de los aparatos, aunada a las altas temperaturas, provocan que no sea posible utilizar las aulas.

“Qué lástima que por esa situación no puedan empezar las clases, espero que pronto se pueda arreglar porque los niños ya quieren conocer su escuela”, dijo Marisela Sánchez, mamá de Andrea, quien decidió que su hija sí asistiría de forma presencial durante este ciclo escolar, pero a causa del robo que registró el plantel no será posible. 

Otra escuela a la que no podrán asistir todos sus estudiantes por los daños que sufrieron las instalaciones durante el período en que las clases presenciales estuvieron suspendidas a causa de la pandemia es la primaria Benito Juárez –a un costado del preescolar de Andrea– porque se quedó sin un medidor de energía eléctrica desde enero de este año, por lo que seis salones no cuentan con el servicio. 

Sin embargo, los estudiantes de los demás grupos sí acudieron a su primer día de clases presenciales, mientras los docentes de los alumnos que no pudieron asistir por la falta de luz se encargaron de hablar con los padres de familia para organizar una metodología de trabajo durante el tiempo en que el servicio continúe suspendido. 

“Me siento muy frustrada porque ya está todo organizado para el regreso y le tuvimos que decir a los papás que hay que esperar porque los salones son muy calurosos y no podemos trabajar en ellos porque ni siquiera circula el aire”, dijo la maestra de sexto grado, Yolanda Bustamante.

La subsecretaria de la SEyD, Judith Soto, señaló que la dependencia a nivel estatal dispone con un recurso de 8 millones de pesos para la rehabilitación de los planteles educativos dañados durante la pandemia por robo o actos de vandalismo, por lo que se espera que en el transcurso de los primeros días de clases se vayan habilitando. 

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