Podría ser ilegal, pero no si eres el presidente

Washington— Las reglas son claras para casi todos los que laboran en el poder ejecutivo: los funcionarios tienen prohibido tener incluso la menor intervención en una decisión con la que directamente pudieran obtener un beneficio  financiero para el empleado o la familia inmediata del empleado.

Sin embargo, esas reglas no aplican al presidente ni al vicepresidente, siendo los únicos funcionarios del poder ejecutivo que están exentos del Estatuto Penal y de una Regulación de Ética que gobierna los conflictos de interés.

Esa exención es la razón por la que el presidente Trump podría participar legalmente en la selección del Resort Trump National Doral, que está cerca de Miami, como el lugar en donde se llevaría a cabo la próxima cumbre del Grupo de los 7 que será el próximo año.

Si alguien del poder ejecutivo, que no sea el presidente Trump o el vicepresidente Mike Pence, tratara de hacer lo mismo, es muy probable que serían bloqueados por los procuradores del gobierno, enfrentarían una investigación de ética y tal vez se convertirían en el objeto de una investigación penal, según dijeron este viernes abogados de ética de ambos partidos.

Además de la ley de conflictos de interés, el seleccionar el resort Doral que consta de 643 habitaciones y que está cerca de Miami para un evento que generará reservaciones de las habitaciones del hotel y otras ventas que equivalen a millones de dólares genera dudas acerca de si otras reglas podrían aplicarse a esa situación, dijeron expertos legales.