Diario
Estado
miércoles, 29 abril 2020 | 15:09
Chihuahua.- El Sistema de Salud de Chihuahua ha sido uno de los más vulnerables desde que inició la administración estatal a cargo de Javier Corral. Los problemas con el abasto de medicamento y con el personal han sido una constante en este gobierno, prueba de ellos han sido las múltiples protestas y paros realizados por médicos y enfermaros. La emergencia provocada por el Covid-19 solamente evidenció las deficiencias en equipamiento y el abasto de medicinas que afectan directamente a los usuarios.
Desde que inició la administración estatal en octubre del 2016, se anticipó que el Sector Salud sería un problema, el cual a tres años y medio, sigue inmerso en deficiencias en varios de sus áreas, principalmente en lo que respecta al abastecimiento de medicamentos.
Las inconformidades por la falta de atención al sector iniciaron a los pocos meses, como la realizada en marzo del 2017m cuando personal médico del Hospital Infantil de Especialidades suspendió sus labores y colocó una manta en el exterior del edificio para protestar por la falta de especialistas, equipo, medicamento y por las condiciones insalubres en que trabajaban.
Los manifestantes se dirigieron al gobernador del estado, Javier Corral Jurado y al entonces secretario de Salud, Ernesto Ávila Valdez para expresar que están trabajando bajo protesta y demandaron mayores recursos, pues se estaba afectando la calidad del servicio que se brinda a la población infantil de Juárez.
Las razones eran la falta de medicamentos, mala calidad de medicamentos, falta de aparato de Rayos X, carencia de personal médico especialista y subespecialista, además por las condiciones insalubres de las áreas hospitalarias.
La violencia también ha sido un factor que impacta al sector, y es que en abril del mismo año en el municipio de Bachíniva, algunos delincuentes intentaron secuestrar a unos médicos que lograron escapar.
También un grupo de médicos que trabajan en los municipios de Guadalupe y Calvo se encontraban bajo protesta, ya que mostraron su inconformidad debido a que no se les garantizó su integridad física ante los frecuentes hechos de violencia. En noviembre hubo otra protesta de médicos, pasantes y estudiantes de la carrera, quienes tomaron las calles y edificios escolares en Ciudad Juárez y Chihuahua en protesta por la inseguridad que mantiene en jaque al gremio, principalmente en la Sierra.
En el 2018 el problema de falta de medicamentos siguió, y en marzo fue realizada una protesta en Cuauhtémoc por lo que calificaron una severa falta de medicamento en las clínicas del Instituto Chihuahuense de la Salud (Ichisal). Fueron en esa ocasión empleados sindicalizados y derechohabientes de la dependencia quienes se manifestaron en el exterior de las instalaciones del hospital de Ginecobstetricia.
Mientras que en Chihuahua capital cientos de agremiados al Sindicato Único de Trabajadores del Instituto Chihuahuense de la Salud (Ichisal) marcharon en protesta por la falta de medicamentos, de insumos en las áreas hospitalarias, de uniformes y la falta de recursos para las jubilaciones.
Esa ocasión fue alrededor de 400 trabajadores de las 11 unidades hospitalarias en el estado los que participaron.
Días después, en abril, trabajadores del Instituto Chihuahuense de la Salud (Ichisal), protestaron en el Congreso del Estado para exigir la homologación de su salario y las mismas condiciones de trabajo que aquellos que están bajo otros esquemas de salud que afecta aproximadamente a 400 empleados. Acusaron que el Estado ha incumplido una serie de convenios que firmó con los afectados.
En diciembre del 2018 se dio una de las protestas más grandes debido a un retraso en los pagos extraordinarios para el personal del Hospital General Salvador Zubirán, por lo que enfermeros, doctores y administrativos se reunieron en las puertas para suspender parcialmente las labores.
Las protestas se prolongaron durante varios días, ya que los empleados esperaban la entrega de bonos de fin de año, lo que finalmente llegó hasta enero del 2019.
En julio, empleados de pensiones civiles del Estado se manifestaron en el exterior del edificio para exigir homologación de sueldos, y luchar contra el acoso laboral.
A partir de septiembre los faltantes de medicamentos provocaron intensas movilizaciones. Los trabajadores generalizon las protestas en el estado al prevalecer la falta de medicamentos, insumos y personal en hospitales públicos y centros de salud.
Treinta mantas fueron colgadas durante un mes en las entradas principales de instituciones de Juárez, Chihuahua, Casas Grandes, Gómez Farías, Cuauhtémoc, Parral, Ojinaga, Camargo, Jiménez, Delicias, Guachochi y Guadalupe y Calvo, entre otros municipios.
En ellas los servidores públicos piden disculpas a los usuarios por no brindarles la atención que merecen y necesitan, dijo Pablo Serna Molina, dirigente de la Sección 52 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSS).
Esta situación prevaleció hasta finales del año pasado y para este 2020 se tenía proyectado mejorar el abastecimiento de medicamentos, pero el inició de la pandemia evidenció el trabajo que no había sido realizado para mejorar el servicio en la entidad.