Bebidas adulteradas pueden provocar ceguera

Chihuahua.– Profesores investigadores de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) señalaron que si no hubo una destilación fraccionada en el proceso de elaboración de bebidas alcohólicas en el laboratorio clandestino que fue descubierto en la colonia Revolución, hay riesgo de que sustancias químicas como el etanol, metanol y otros aldehídos hayan sido consumidos y puedan provocar ceguera y otros daños a la salud.

Los entrevistados, quienes pidieron la reserva de sus nombres, expresaron que la Fiscalía General del Estado debe solicitar la intervención de laboratorios para determinar qué tipo de sustancias hay en las bebidas aseguradas en botellas de tequilas, whiskys y otros.

El proceso de destilados en los whiskys, rones y demás es muy importante en las casas consolidadas vitivinícolas. Se da un efecto de purificación que es para arrastrar algunos compuestos que pueden tener efectos crónicos degenerativos y repercuten en la salud pública, explicaron.

“En la destilación se fraccionan muchos elementos químicos, por ejemplo algunos alcoholes, compuestos como etanol, metanol, aldehídos. De la destilación como tal radica la importancia de fraccionar esos elementos que no van a tener efectos repercutivos”, expresaron.

Los químicos de la UACH entrevistados destacaron que lo que interesa en el proceso de destilación es el etanol o el alcohol etílico.

“Si no se hace un proceso correcto de destilación, el metanol puede provocar ceguera porque genera consecuencias muy drásticas al momento de un consumo”, apuntaron.

Mencionaron que las personas que elaboran clandestinamente bebidas alcohólicas para igualar sabores agregan compuestos de alcohol, como el alcohol puro de 96 grados, y van diluyendo con agua y colorantes, también otros elementos esenciales para dar aroma y color.

“La industria de adulteración siempre ha existido, donde agregan compuestos químicos que son ajenos a la propia endemia del producto. Por ejemplo el alcohol de caña, hay aromas a vainillas o ciertos compuestos de agua destilada”, detallaron.

“No sabemos cómo hacían las bebidas en ese laboratorio; sí deben investigar cómo conseguían los marbetes para las botellas. Lo que se debe hacer es investigar qué tipo de substancias utilizaban, hay estudios analíticos en donde se puede perfilar qué trae de compuestos presentes en esas bebidas y cuál es el riesgo tóxico degenerativo que pueden provocar”, alertaron los entrevistados, los cuales propusieron que los laboratorios en la Facultad de Ciencias Químicas son aptos para poder hacer dichos estudios, pero que corresponde a la FGE hacer una solicitud formal.