Tiene Lizzo puro amor propio

Ciudad de México– En un panorama repleto de música comercial existe una figura que con su autenticidad y coraje ha trazado un nuevo camino, mismo que rompe los estándares de la industria del entretenimiento: Lizzo.

Con su visión de autoaceptación, la cantante, de 31 años, ha conquistado no sólo el ámbito musical con tres Grammy, sino a sus ocho millones de seguidores, que día con día aplauden el discurso que guía su rumbo.

"Hace tres proyectos hice una canción que se llamaba My Skin y fue una de las únicas canciones de amor propio que tenía, y tocó a mucha gente, se acercaban y me decían 'amo esa canción, me hizo celebrarme a mí mismo', y entonces dije: 'Si estoy ayudando a las personas, ésa es la dirección a la que tengo que encaminarme'", compartió Melissa Viviane Jefferson, nombre real de la intérprete, en entrevista.

"Me tomó un largo tiempo poder ser buena en ello porque hay mucho trabajo de prueba y error cuando se trata de empoderarte a ti mismo. Tuve que trabajar cada día con una nueva anomalía, un nuevo reto, y creo que mi música se trata de sobrepasar esas adversidades, siempre atravesando el conflicto".

Pese a que ya contaba con dos materiales discográficos, Lizzobangers (2013) y Big Grrrl Small World (2015), no fue hasta Cuz I Love You (2019) que la artista logró conectar finalmente con los ideales que tenía.

"Aprendí mucho de amor propio, de amarme a mí misma y cómo funciona eso en el mundo real. Puedes amarte todos los días en casa, pero apenas pongas un pie en el exterior, habrá gente que quiera quitarte eso, y, ¿qué harás en esa situación? Y eso es lo que Cuz I Love You representa”.

"Hay muchas canciones que son como instantes de mi vida en ese momento, y cuando pienso en este álbum, digo '¡wow!, todo eso es por lo que pasé, lo que solía ser', y todo es completamente distinto ahora, y creo que esa es su belleza. Este álbum me cambió la vida", explicó.

La estadounidense se ha posicionado como una de las figuras referentes del pop, siendo nombrada Artista del Año por la revista Time y la portada de este mes en la revista Rolling Stone, fotografiada por David LaChapelle, además de prestar su voz en el filme Ugly Dolls y hacer una aparición especial en Hustlers.

Y si bien con ello ha demostrado que no existe nada que no pueda hacer, en caso de que la fama le hiciera perder el piso, confía en que tiene amistades que la traerán de vuelta.

"El medio puede cambiarte, y ahora veo en primera instancia cuánto están manipuladas las cosas, y diré que soy muy afortunada de tener gente que me mantiene en la tierra y no intenta cambiar mi mensaje, y ese apoyo me inspira para mantenerme siempre honesta en lo que soy", aseguró.