Avanza recuperación… y créditos caros

Tras el periodo agudo de la pandemia en que la tasa de referencia del Banco de México cayó a su mínimo, se prevé ahora una tendencia alcista con la recuperación económica. 

El Banco de México ya dio el primer paso al subir en días recientes a 4.25 las tasas de interés, después de que por meses se mantuvo en un 4 por ciento.

Isaac Leobardo Sánchez Juárez, encargado del laboratorio de Economía de la UACJ, explicó que el alza del referencial puede verse reflejado en el aumento del costo de créditos como los hipotecarios, automotrices y de consumo.

El cambio también se refleja en los intereses que se cobran en las tarjetas de crédito, aunque depende de cada banco.

"Ese 4.25 solo es de referencia, es el precio al que los bancos comerciales les cuesta obtener dinero del Banco de México, pero lo que se refleja en los usuarios", dijo.

También las empresas o personas morales pueden verse alcanzadas con un aumento en el costo de los financiamientos para pago de salarios, de operación del establecimiento, crecimiento de las operaciones, entre otros.

Sin embargo, resaltó que sólo es para créditos nuevos, ya que los contratados con antelación no sufrirán cambios. 

"En créditos ya contratados no hay un efecto, solo en los nuevos porque se encarece el costo del financiamiento", destacó el experto.

Agregó que no todo es negativo, ya que se tiene también un efecto positivo para las personas que ahorran porque existe una menor pérdida de valor del dinero con la inflación. 

"Por eso es que el Banco de México no puede reducir sus tasas de interés a cero, porque afecta los ahorros, y sin ahorros no hay inversión", dijo.

El catedrático de la UACJ explicó que un movimiento en la tasa de referencia es una de las herramientas de política monetaria con las que cuentan el Banco de México y todos los bancos centrales del mundo. 

El objetivo de ello es mantener la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda, lo que impacta en otras variables económicas como la inflación y el crecimiento económico.

El Banco Central tiene como mandato único la estabilidad de precios y cuenta con un rango objetivo de una inflación de 3 por ciento +/- un punto porcentual, aunque esta se ubicó en un 6.02 por ciento a nivel nacional durante la primera quincena de junio.