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El viernes, un equipo de científicos rusos publicó el primer informe sobre su controvertida vacuna Covid-19. Escribiendo en la revista “The Lancet”, informaron que los voluntarios produjeron una cantidad relativamente modesta de anticuerpos contra el coronavirus.
En agosto, el presidente Vladimir V. Putin anunció con gran fanfarria que la vacuna, llamada Sputnik V, “funciona con la suficiente eficacia” para ser aprobada. Declaró ser un "paso muy importante para nuestro país, y en general para el mundo entero".
Pero los desarrolladores de vacunas criticaron rotundamente el anuncio y observaron que no se habían publicado datos sobre la vacuna. Además, los científicos rusos aún tenían que realizar un ensayo a gran escala para demostrar que la vacuna era segura y eficaz.
El nuevo artículo ofrece la primera oportunidad de observar más de cerca la vacuna Sputnik V.
Los investigadores del Instituto de Investigación Gamaleya diseñaron la vacuna utilizando un virus diferente como vehículo para transportar genes del coronavirus a las células. Los virus vehículo, llamados adenovirus, se desactivaron para que solo pudieran ingresar a las células, pero no replicarse.
Los adenovirus portaban un gen de coronavirus que codificaba una proteína en la superficie del virus. Las células producen la proteína, que luego estimula el sistema inmunológico de las personas.
El equipo ruso publicó los resultados de lo que se conoce como un ensayo de fase 1/2 (donde se combinan las fases 1 y 2). Esta es una etapa temprana de la investigación clínica, en la que los científicos administran una vacuna a los voluntarios, observan si producen anticuerpos contra un virus y verifican si hay efectos secundarios.
El ensayo fue relativamente pequeño. Solo 40 voluntarios recibieron la vacuna completa con ambos tipos de adenovirus, y nadie recibió un placebo para comparar. La vacuna rusa produjo síntomas leves, los más comunes fueron fiebre y dolores de cabeza. Los investigadores encontraron que los voluntarios que recibieron la vacuna completa produjeron anticuerpos contra el coronavirus. Produjeron células inmunes que también podrían responder fuertemente al coronavirus.
En su artículo, los investigadores observaron que la vacuna no produjo tantos anticuerpos como la de AstraZeneca o Moderna.
Akiko Iwasaki, inmunóloga de la Universidad de Yale que no participó en el estudio, consideró que la vacuna produjo "buenos niveles de anticuerpos en todos los voluntarios". Pero agregó que nadie sabe todavía qué nivel de anticuerpos o células inmunitarias se requieren para proteger a las personas de enfermarse. "Es difícil saber si la vacuna será eficaz", dijo.