Juárez

Accidente en Delicias

Sepultan a víctimas; empresa no responde

Tienen que reunir recursos entre familiares y víctimas para velorios; exigen actuar a las autoridades

Luis Carlos Cano
El Diario de Juárez

lunes, 09 diciembre 2019 | 06:00

Carlos Sánchez / El Diario de Juárez

Ciudad Juárez— Además del dolor de perder a un ser querido, familiares de víctimas del camionazo, se enfrentan a la situación de pagar los servicios funerarios, pues la empresa Nómada Tours, propietaria del autobús accidentado, no ha respondido con la indemnización correspondiente.

Ayer algunas de las personas que fallecieron en el accidente seguían en funerarias, mientras a otros ya fueron sepultados, como es el caso de Víctor Manuel Carrillo, a quien inhumaron en el Panteón Tepeyac, tras velarlo en su casa en un ambiente de tristeza, pero con música de los años sesenta que a él le gustaba, dice su hermana Yesica Romero. 

La madrugada del pasado jueves un camión “pirata” de la línea Nómada Tours, con oficinas en esta frontera, se volcó en la carretera Delicias-Saucillo y dejó un saldo de 14 personas muertas y otras 35 con lesiones; el camión chocó contra un muro de contención del puente “El Barril” y posteriormente se volteó sobre el asfalto.

Algunos de los muertos en este percance son velados en sus casas, como es el caso de una mujer que vivía en la colonia Independencia II; otros los tendrán en la funeraria, comentó la encargada del establecimiento Luz Divina, donde esperan otros cuerpos para este lunes.

Ahí fueron las honras fúnebres de la señora Ericka Leticia Huizar Amaro, quien tenía 59 años de edad y la sepultarán hoy en el Panteón Tepeyac, probablemente en la tarde, manifestó su hija Rocío Huizar, quien dijo que la empresa transportista no les ha respondido con la cobertura de los gastos funerarios.

Además indicó que en la Fiscalía General del Estado les ofrecieron el ataúd para su mamá, pero no lo aceptaron porque se les hizo muy sencillo, sólo era de madera y cubierto el interior con tela, por lo que entre los seis hijos de la señora juntaron los seis mil pesos que les costaba un féretro y le compraron uno mejor, además de reunir otros ocho mil pesos para el panteón.

“Batallamos para juntar esos 14 mil pesos, en la familia no tenemos dinero y tuvimos que pedir prestado a familiares y amigos para juntar lo que nos cuesta el funeral de mi mamá”, dijo la mujer.

Comentó que desde el día del accidente fue a las oficinas de la empresa Nómada Tours, pues conoce desde hace tiempo al propietario de apellido Gámez, pero fue hasta el sábado que le dieron una copia de la póliza del seguro del camión accidentado y le informaron que se harían cargo de los gastos, pero esto no ha ocurrido y ya no le dan una respuesta sobre el tema.

“Nos da coraje, es una burla lo que están haciendo en la línea de camiones; ellos siguen trabajando como si nada y nosotros sufriendo la perdida de nuestro familiar, además de que las autoridades no les exigen el pago del seguro y el alcalde Armando Cabada que dijo que nos iban a ayudar no ha hecho nada”, expresó.

Los que están conformes con el apoyo que les dio la Fiscalía General del Estado son los familiares de Víctor Manuel Carrillo, otra de las personas que falleció en este accidente y que ayer sepultaron en el Panteón Tepeyac, luego de las honras fúnebres en su casa, en la colonia Monterrey, situada en la zona poniente de la ciudad.

Yesica Romero hermana de Víctor Manuel, dijo que el dueño de los camiones les dijo que se iban a hacer cargo de todos los gastos, pero no han recibido nada de esa empresa, ya que el ataúd es el que les dio la Fiscalía y ellos pagaron el costo del camposanto.

“Por ahora queremos despedir a nuestro hermano aquí en la casa, por eso no quisimos el servicio de la funeraria, queríamos estar con el día y noche antes de sepultarlo”, dijo Yesica.

Durante el funeral, la familia de Víctor decidió vestir una camiseta blanca con la fotografía de este hombre que tenía 36 años de edad, que apodaban “Malacara” y viajaba en el autobús accidentado con destino a Torreón, a donde se dirigía para llevarles una televisión a sus dos hijas de 11 y 12 años de edad que radican en aquella ciudad de la región lagunera.

“Él iba muy contento a ver a sus hijas y llevarles la televisión que le habían pedido, pero no llegó a verlas, se murió en el accidente”, finalizó Yesica.

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