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Juárez

Tragedia en la México 68

‘Se prendió la casa y no pudieron salir’

Familiares de las víctimas que fallecieron en el incendio, narran lo que vivieron la madrugada de ayer

Sandra Rodríguez
El Diario de Juárez

miércoles, 02 marzo 2022 | 08:35

Staff / El Diario de Juárez | Un bombero durante su trabajo, al fondo vecinos de las familias fallecidas Gabriel Cardona / El Diario de Juárez | Trabajadores de Protección Civil ingresan a la propiedad afectada

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Ciudad Juárez.— Sobre una colina de la calle Emiliano Zapata, frente a lo que fue la casa a la que llegó con su madre y sus cinco hermanos a mediados de los años 80, Blanca Salas Franco contó ayer que José Luis, de 45 años y el más cercano a ella, le había contado hace apenas unos días que ya había encontrado trabajo. 

“Luis mi hermano era rutero; después se acabó el trabajo y trabajaba en un taxi. Andaba volado porque le habían dado ya trabajo”, dijo.

A él y al menor, Juan Aarón Salas Franco, de 36, los había visto por última vez el pasado domingo, cuando acudió a la vivienda ubicada en la calle Salvador Allende a pedirle al primero que le ayudara a reparar las goteras de su techo y, al segundo, a invitarlo a comer el próximo sábado.

Ambos, sin embargo, perecieron en un incendio que, ayer por la madrugada, consumió las dos viviendas en la que convirtieron la casa materna y que habitaban con sus familias, fallecidas junto con ellos: Luis con Sonia Nájera y sus hijas –Nancy  e Ingrid, de 17 y nueve años- y Aarón con Sandra Núñez y sus pequeños Vanesa y Juan Aarón, de 12 y ocho.

“Es un dolor bien fuerte”, alcanzó a decir entre sollozos Blanca Estela, de 57 años y la mayor de los seis. 

Con manos en las bolsas de la chamarra marcada con la etiqueta de la maquila para la que trabaja, mientras recibía pésames y palabras de apoyo, ella y otros dos de sus hermanos esperaban ayer por la mañana a que los integrantes del cuerpo de Bomberos les informaran el motivo del incendio. 

No sabían, dijeron, si la conexión a la corriente eléctrica que tenían era irregular, como indicó una versión preliminar de los empleados municipales. También escucharon que pudo haber sido un ataque intencional después de un intento de asalto, lo que podría explicar, comentó alguien, las más de seis horas que duraron los empleados de Protección Civil aun después de apagado el fuego.

“Pero ya qué ganamos, ya qué hacemos”, comentó Blanca Estela. 

Como otros familiares y vecinos, los Salas Franco aguardaban detrás del cordón amarillo colocado para resguardar la casa en la que alrededor de las 2:00 de la madrugada se registró el siniestro que, consideran, arrancó desde la parte frontal, atrapando a las hoy víctimas, que no tenían salida por el patio. 

“Se prendió la casa y no pudieron salir, y el mismo humo los acorraló (…) Estamos esperando que nos digan a ver qué pasó”, dijo Claudia González, sobrina de los fallecidos.

‘No pudimos hacer nada’

Un boquete en la parte trasera de una de las dos viviendas quedó como muestra del intento de uno de los vecinos por prestar auxilio. 

Fue alrededor de las 2:00 de la mañana, contó Nazario Trujillo, de 52 años y habitante de la casa contigua a las siniestradas, que escuchó primero el ladrido de los perros y, afuera, vio el resplandor de las llamaradas que ascendían unos seis metros. 

Toda la parte de enfrente estaba cubierta en llamas, agregó, por lo que él y su yerno tomaron picos y un marro para golpear la pared trasera de la incendiada, que colinda con su patio. 

“Me asomé por aquí (el frente) pero ya no se podía hacer nada, porque estaba lleno de lumbre, entonces quisimos hacer un movimiento, pero estaban bien enrejados. Nos fuimos por allá atrás e hicimos un boquete a la pared, como a las 2:25, y sí lo hicimos el boquete con pico y marro. Cuando hicimos el boquete, así como lo hicimos, así salió todo el humo”, dijo.  

“Créame que, si se hubiera mirado algo, nos hubiéramos metido; pero no se miraba nada, si nos metíamos no sabíamos por dónde íbamos a caminar. Pero sí hicimos toda la lucha, todo lo que se pudo hicimos”, agregó el hombre, que señaló haber conocido a las víctimas de años.

‘Gente trabajadora’

Ubicada en la parte poniente de Ciudad Juárez, a un costado del Parque Industrial Gema, la colonia México 68 era un páramo casi sin casas cuando llegó con sus hijos la madre de los hoy fallecidos, la duranguense Anastasia Franco. 

“Vivíamos en casa de madera, de paletas (tarimas industriales de madera). Ya con el paso del tiempo se fue comprando adobe, poco a poquito se fue haciendo la casa. Y esa casa era de mi mamá, nada más que lamentablemente falleció mi ‘jefa’ de cáncer, y ya mis hermanos se quedaron ahí en la casa, y poco a poco la fueron arreglando, porque ellos vivían ahí”, narró Salvador Ramírez Franco. 

Aarón trabajaba en el “bacheo”, dijeron, mientras que su esposa Sandra era empleada en una maquiladora. Sonia trabajaba en casa vendiendo pasteles que su marido Luis, cuando no tenía empleo, le ayudaba a preparar. 

Eran “gente trabajadora”, resumió Beatriz Rubio, de 53 años y madre de Sandra, que tambien presenciaba con calma el ir y venir de los empleados municipales.

Blanca Estela contó también que se hizo cargo de cuidar a casi todos sus hermanos, sobre todo a Luis, a quien “navegó” como si fuera su hijo. Era él también, recordó, quien le ayudaba con los cuidados de uno de sus propios hijos, enfermo después de un asalto. 

“Luis”, musitó entonces Blanca Estela entre el llanto, como si fuera un quejido. 

En la entrevista, alguien le pasó un teléfono celular para que hablara con una de las hijas que Aarón tuvo en su primer matrimonio.

“Falleció tu papá”, le dijo con la voz entrecortada. “Aquí estamos todavía en la casa, hija. Esperando que nos digan qué pasó”, agregó. 

La mayor de la familia había llegado desde la madrugada a la zona siniestrada, luego de que uno de sus hermanos le llamó por teléfono para decirle que había iniciado un incendio en la casa de Aarón. Pocos minutos después, dijo, le llamó de nuevo.

“Me volvió a hablar, a las 4:04, cuando me dijo que habían fallecido todos. ‘¿Cómo que se murieron todos?’ ‘Si’, dijo, ‘ya están muertos”, agregó entre llanto.

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