Organismos condenan caso

Ciudad Juárez— Casos como el de Irving Zaragoza y Fátima López, con personas que son detenidas por policías y luego aparecen muertas, son un reto para la sociedad y para las organizaciones no gubernamentales que se preocupan por las desapariciones, pero también es obligación de las autoridades esclarecerlos, castigar a los responsables y no ocultar nada a la comunidad, coincidieron en señalar defensores de los derechos humanos.

En casos como éste, es muy grave que agentes de la Policía Estatal sean señalados como responsables y que además entreguen a las personas que detienen a otros sujetos, posiblemente del crimen organizado, son hechos muy graves en los que debemos exigir justicia, dijo el sacerdote Óscar Enríquez Pérez, director del Centro de Derechos Humanos Paso del Norte.

“Creo que hay una responsabilidad muy seria en darle seguimiento a este caso y no perder la memoria en este tipo de situaciones”, agregó Enríquez Pérez.

Evidentemente, señaló, arrastramos una serie de casos de este tipo que tiene que responder la Policía Estatal, el fiscal de la Zona Norte y el fiscal general del Estado, sobre este tipo de comportamiento de quienes integran las corporaciones.

“Desde el Centro de Derechos Humanos a veces nos sentimos frustrados porque no hay avances en las investigaciones, se da un encubrimiento estructural para proteger a los delincuentes que están ahí dentro”, expresó.

“Son crímenes que no deberían ser, al Estado le toca proteger los derechos humanos y garantizarlos, pero son las mismas autoridades quienes violentan las leyes y los derechos humanos”, señaló.

“Este tipo de abusos policiales vienen lastimando la integridad de las personas y la imagen de las corporaciones policiacas, es algo que reprobamos totalmente; la red Tira Paro presentó el año pasado el informe del protocolo para la detención de personas y debe ser transparente en todo momento”, señaló sobre el tema Laurencio Barraza, dirigente de la citada agrupación, formada por distintas organizaciones civiles.

La red Tira Paro está formada por Desarrollo Juvenil del Norte (DJN), el Centro de Asesoría y Promoción Juvenil (CASA), Techo Comunitario, Jaguares A.C. y el Centro de Investigaciones y Desarrollo de Proyectos Sociales, Educativos y de Salud (Cideses), organizaciones que trabajan por distintos grupos de la comunidad.

Barraza manifestó que en toda detención debe existir la flagrancia en la comisión de un delito, pero en el caso de Irving Zaragoza y Fátima López se desconoce si fue así.

“Es lamentable este hecho, no debería suceder, pues la Policía está para garantizar la integridad de los ciudadanos, no para lastimarlos y agredirlos”, expresó.

El coordinador de Tira Paro dijo que debe actuarse en consecuencia y detener a los responsables, más cuando se trata de instancias gubernamentales, ante lo cual la Fiscalía General del Estado debe ir a fondo en las investigaciones y hacer públicos los avances en la investigación.