Esperan más de 50 migrantes en cruce internacional

Decenas de personas migrantes en busca de asilo en Estados Unidos permanecen desde hace días en las instalaciones del puente internacional Zaragoza, a donde fueron enviadas por los agentes de la Guardia Nacional de Texas que resguardan el bordo del río Grande, para que ingresen por un puerto de entrada oficial. 

Ayer sumaban más de 50 las personas provenientes de países como Venezuela, Guatemala, Colombia y Ecuador, quienes después de llegar con los oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) fueron devueltas a esperar en México hasta que haya espacio para recibirlas.

“Fuimos al río y los miliares nos mandaron para acá a pedir asilo, nos dijeron que nos viniéramos al puente. Yo fui con ellos pero me dijeron que esperáramos acá y ya el sábado pasaron una familia con niños”, narró un sudamericano; sin embargo, otra migrante aseguró que sólo han sido recibidos por los agentes estadounidenses menores no acompañados. 

Un migrante de Colombia dijo que él, su esposa, su hija y su sobrina, permanecen en las instalaciones del cruce internacional, lejos del flujo de peatones y vehículos, desde el martes 9 de mayo, debido a que cuando acudieron al río en busca de entregarse, los agentes de la GN de Texas les aconsejaron que mejor buscaran entregarse en un puerto de entrada oficial para que no fueran deportados bajo el Título 8, y el cruce más cercano era el Zaragoza-Ysleta. 

El padre de familia dijo que el sábado 13 de mayo tuvieron que retirarse un rato a hacer unos trámites y que cuando regresaron el resto de las personas les dijeron que ya habían recibido a familias con menores. 

‘Hace mucho frío’

Dijo que después de dormir días con sus hijos sobre el asfalto, otras familias se han desesperado y han decidido acudir a otros cruces internacionales para acercarse a los agentes de CBP y pedirles el acceso a Estados Unidos. 

“En la noche hace mucho frío, hasta le duelen a uno los pies… yo a él lo cobijo con mi suéter”, dijo “Luis”, al tocarse las rodillas y encorvarse en posición fetal para mostrar cómo duerme con su primo de ocho años de edad. 

El migrante de 25 años, proveniente de Guatemala, dijo que desde hace cinco años él se encarga de su primo, debido a que no tiene padres y la tía con la que vivían murió, por lo que al explicarles su parentesco a los agentes de CBP le dijeron que podían recibir al menor solo, para luego entregarlo a sus familiares en Estados Unidos, pero que pasaría mucho tiempo incomunicado, por lo que el niño le pidió que no se separaran. 

Los extranjeros aseguraron ayer que activistas como los Jesuitas han acudido algunos días a apoyarlos con alimentos, los cuales primero procuran dar a los niños, niñas y adolescentes, luego a las mujeres y finalmente a los hombres. 

“Ellos nos tratan bien (los trabajadores del Fideicomiso de Puentes Internacionales de Chihuahua); ellos (el personal del Instituto Nacional de Migración), a veces nos corren, nos dicen que no podemos estar aquí, también les piden que no nos ayuden (con comida)”, dijo el centroamericano.

Junto al nuevo campamento se encuentra baños portátiles, los cuales fueron roseados ayer por los propios extranjeros de Fabuloso por fuera, para mitigar su olor. 

Algunos de ellos aseguraron que mientras permanecen en las instalaciones federales han intentado lograr una cita para cruzar la frontera a través de la aplicación CBP One, pero no la han conseguido.