Castigan a 432 ruteros… y los perdonan

En lo que va del año, la Dirección de Transporte Zona Norte ha sacado de circulación 432 camiones de transporte público y de personal tras los operativos de verificación, de los cuales 416 regresaron a las calles de Juárez tras atender las observaciones realizadas durante el proceso de inspección.

Al menos 16 unidades permanecen en el ‘corralón’ por incumplir con las condiciones físico-mecánicas, estar pintadas de un color no autorizado o por no contar con las licencias correspondientes para su operación.

Luis Manuel Aguirre, titular de la dependencia, informó que los operativos se realizan de manera permanente para detectar aquellos vehículos que no se encuentren en óptimas condiciones para ofrecer el servicio, poniendo en riesgo la integridad de chofer, pasajeros y otros conductores.

Como parte de las inspecciones físico-mecánicas, personal de Transporte revisa desde asientos hasta el sistema de frenos, entre otros elementos. Sin embargo, se informó que la falta más común es por contaminación.

Entre las fallas mecánicas más comunes que han sido detectadas destacan problemas en la dirección y amortiguadores, barras estabilizadoras dañadas y fugas de aceite.

“Hemos sacado camiones como nunca, andamos detrás de ellos. En lo que va del año llevamos 432, principalmente por contaminantes, fallas físico-mecánicas y por no traer el color autorizado (camiones amarillos)”, señaló.

De acuerdo con el funcionario, cuando se detecta un camión contaminante se le da un plazo de una semana para que el concesionario realice los arreglos necesarios y pueda regresar a circulación, de lo contrario no puede ser puesto en funcionamiento y de persistir el problema, la unidad es reingresada al ‘corralón’.

En el caso de falla físico-mecánica, si el autobús fue detectado dando el servicio, primero es ingresado al ‘corralón’, donde el propietario deberá cubrir los gastos de traslado y estancia, posteriormente, el camión es sometido a una nueva revisión y se le da al concesionario un plazo de dos semanas para atender las observaciones, una vez hecho lo anterior, se hace una valoración y de cumplir con los criterios de Transporte, el autobús puede volver a las calles.

Si las fallas fueron detectadas en las jornadas de verificación de la dependencia, el autobús no es ingresado a ‘corralón’, pero no puede circular hasta que se hagan las reparaciones correspondientes para después solicitar una nueva revisión.

Para aquellos camiones que fueron sacados de circulación por no contar con el color permitido, es decir, autobuses tipo escolar (amarillo) que brindan servicio de transporte urbano o de personal, se le da al concesionario un plazo de 15 días para cambiar la pintura de la unidad.

En los tres casos anteriores, la multa por faltar al reglamento de Transporte puede ascender al valor de las 100 Unidades de Medida y Actualización (UMAs), que para este 2022 es de 96.22 pesos, por lo que las sanciones pueden alcanzar los 9 mil 622 pesos, según la gravedad, detalló Aguirre Aguilera.

Aunque la Dirección de Transporte no proporcionó información sobre las líneas que más han sido sancionadas, sí se dio a conocer que hasta el momento, del total de camiones que han sido enviados al ‘corralón’, sólo 16 permanecen resguardados, casos en los que el concesionario, ni siquiera ha tenido acercamientos para iniciar el trámite para recuperar la unidad. 

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