Juárez
martes, 12 febrero 2019 | 12:24
Ciudad Juárez— Mientras Ana Rosa García Hernández, de 12 años, es velada en la Funeraria Del Carmen por sus familiares, a pocos kilómetros de ahí sus compañeros de clase son atendidos por psicólogos que los apoyan a sobrellevar el dolor ante la muerte inesperada de Rosita.
Personal de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) a través de la Dirección de Prevención Social, acudieron a la Escuela Primaria Estatal Nuevo México, situada al poniente de la ciudad, para brindar atención emocional a los niños de 5to. y 6to. grado, que convivieron con la menor que el pasado 8 de febrero se suicido.
“El primer día de clases fue muy difícil, muy triste y a todos nos dolió”, dice Rodolfo Durán, director del plantel educativo.
El docente refiere que el Programa Nacional de Convivencia Escolar está apoyando no sólo al alumnado, sino a los docentes y a los padres de familia, por lo que toda la semana tendrán la intervención especializada del personal de la Policía Municipal y la Fiscalía General del Estado.
Ana Rosa García Hernández era una alumna sobresaliente en este plantel educativo y la mañana, cuando ocurrió su muerte, se le informó que había ganado el segundo lugar en el concurso de aprovechamiento escolar.
Ana Rosa era muy competitiva, recuerda su maestra Nohemí Mesta,