Partido de Bolsonaro atacó al sistema electoral poco antes de la votación

Río de Janeiro.- Durante meses, los funcionarios en Brasil y la comunidad internacional han visto cómo el presidente Jair Bolsonaro cuestiona los sistemas de votación del país y su preocupación ha ido en aumento ante la posibilidad de que el mandatario de ultraderecha estuviera preparando el terreno para impugnar las elecciones en caso de perder.

Y el miércoles por la noche, el partido político del presidente emitió un documento que aseguraba, sin aportar pruebas, que un grupo de empleados de gobierno y contratistas tenían el “poder absoluto de manipular los resultados electorales sin dejar huella”.

Ese fue uno de los ataques más significativos contra el sistema electoral de Brasil hasta el momento. El partido dijo que había llegado a esa conclusión tras una auditoría del sistema electoral que había encargado en julio y que emitía ahora la información debido a que los funcionarios electorales no habían tomado medidas suficientes.

La autoridad electoral de Brasil respondió de inmediato el miércoles. Las conclusiones del documento son “falsas y deshonestas y no tienen respaldo en la realidad” y constituyen “un intento claro de obstaculizar y trastornar el curso natural del proceso electoral”, indicó la agencia en un comunicado. El Tribunal Superior dijo que ahora investiga al partido del presidente por haber difundido el documento.

El documento electrizó una contienda presidencial que ya tenía al país al límite. El intento de desacreditar los sistemas de votación apenas días antes de las elecciones aumentó los temores de que, al enfrentar cifras de sondeos en declive, Bolsonaro se preparaba para desafiar los resultados de las votaciones del domingo.

La noche del miércoles, las noticias del documento se difundieron rápidamente entre los seguidores de Bolsonaro en las redes sociales; hubo personas que compartieron artículos de derecha sobre las afirmaciones y teorías de la conspiración que decían que era prueba de lo que el líder brasileño venía diciendo. Un video de YouTube al respecto atrajo más de 100.000 vistas en apenas unas horas. Una congresista conservadora, Carla Zambelli, fue una de las primeras en publicar el documento en las redes sociales, al compartirlo con sus 1,9 millones de seguidores en Twitter.

Sin embargo, muchos otros políticos, entre ellos Bolsonaro, no lo mencionaron en línea. En su comunicado del miércoles por la noche, la autoridad electoral recordó a los funcionarios electos y a los candidatos que podían ser impugnados o se les prohibiría postular si compartían información falsa sobre el sistema de votación. La pronta reacción evitó que los políticos difundieran más ampliamente el documento.

Los líderes del Congreso de Brasil, las cortes y las fuerzas armadas han dicho que no tolerarán ningún esfuerzo por desestimar la voluntad de los votantes, pero en privado muchos dicen que les preocupa que los seguidores de Bolsonaro reaccionen con violencia ante una derrota. En julio, tres de cada cuatro simpatizantes de Bolsonaro le dijeron a la principal encuestadora de Brasil que su confianza en las máquinas de votación era “poca” o ninguna.

No hay indicios de que en el pasado haya habido fraude generalizado.