¿Levantar el Título 42 de EU causará una crisis fronteriza?

El Paso, Texas.— Durante meses, migrantes de Nicaragua y Colombia, con niños pequeños a los hombros y mochilas a la espalda, han estado cruzando las aguas poco profundas del Río Bravo cerca de El Paso y formando filas para entregarse a las autoridades fronterizas de Estados Unidos. Más al oeste, en Arizona, inmigrantes de Rusia, India y América del Sur han estado atravesando brechas en el muro fronterizo y rindiéndose a los agentes estadounidenses.

Ninguno de ellos ha sido frenado por una medida de salud pública de casi tres años, conocida como Título 42, que fue anunciada como un intento de cerrar efectivamente la frontera contra el creciente número de inmigrantes que ingresan ilegalmente a Estados Unidos. No se les impide presentar una solicitud de asilo; no están siendo expulsados a México.

Los migrantes se alinean en las aceras en El Paso, donde muchos han estado durmiendo bajo mantas donadas porque los refugios están llenos. Los migrantes detenidos en Arizona están siendo transportados en autobús a San Diego para su procesamiento a fin de evitar el caos en las instalaciones de detención abarrotadas, y luego los dejan en las estaciones de autobuses para dirigirse a destinos en todo el país.

La Corte Suprema bloqueó este martes el intento de la administración de Biden de levantar la restricción pandémica de la era de Trump en la frontera sur después de que 19 estados liderados por republicanos argumentaron que la terminación inmediata de la regla causaría estragos en la frontera.

Pero la realidad es que, a pesar de todas las oscuras predicciones sobre lo que sucederá cada vez que se levante el Título 42, la frontera sur ya se encuentra en medio de un aumento sin precedentes de la migración que probablemente persistirá en el futuro previsible. La medida de control fronterizo está llena de exenciones bajo las cuales decenas de miles de migrantes cada mes se presentan en los puertos de entrada de Estados Unidos con un grado relativamente alto de confianza en que se les permitirá quedarse.

“Posponer el final del Título 42 evitará un pequeño momento de caos, pero no brinda una solución a lo que está sucediendo en la frontera”, dijo Andrew Selee, presidente del Instituto de Política Migratoria, un grupo de expertos no partidista.

“La realidad es que las personas provienen de un grupo de países mucho más amplio que nunca, y la mayoría no está sujeta al Título 42”, dijo. “No existe un conjunto de políticas para hacer frente a un número creciente de personas de otras partes del mundo. El Título 42 ha perdido durante mucho tiempo la mayor parte de su eficacia como herramienta de disuasión”.

El mes pasado, el 29 por ciento de todos los que cruzaron la frontera fueron expulsados bajo el Título 42, mientras que la gran mayoría provenía de una larga lista de países, incluidos Colombia, Cuba, India, Nicaragua y Rusia, entre otros, para los cuales el Título 42 no se aplica.