Investigaba al Ejército y lo espiaron con Pegasus

Nueva York.- Él es un amigo desde hace tiempo del presidente, un cercano aliado político durante décadas y actualmente es un alto funcionario de Derechos Humanos del gobierno.

Y ha sido espiado en repetidas ocasiones.

Alejandro Encinas, el subsecretario de Derechos Humanos de México, fue espiado con Pegasus, el spyware más famosos del mundo, mientras investigaba los abusos del ejército del país, de acuerdo a cuatro personas que hablaron con él acerca del hackeo y de un análisis forense independiente que lo confirmó.

Desde hace tiempo, México ha sido sacudido por escándalos de espionaje. Aunque este es el primer caso confirmado contra un miembro de alta jerarquía de una administración, además de ser alguien muy cercano al presidente, que ha sido vigilado a través de Pegasus en más de una década en que ha sido utilizada esta herramienta de espionaje en el país.

Los ataques contra Encinas, que no habían sido reportadas anteriormente, socavan seriamente el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador de lo que él catalogó como un espionaje “ilegal” del pasado.

También es una señal clara de lo libre en que se ha convertido la vigilancia en México, cuando no uno, sino los aliados del presidente parece que están fuera de los límites.

Pegasus está autorizada sólo para las agencias gubernamentales, y aunque no existe una prueba definitiva de cuál llevó a cabo el hackeo del teléfono de Encinas, el ejército es la única entidad en México que tiene acceso a ese spyware, de acuerdo a cinco personas que están enterados de los contratos.

De hecho, el ejército mexicano se ha enfocado más en los teléfonos celulares con tecnología que cualquier agencia gubernamental del mundo.

Desde hace tiempo, Encinas ha estado en desacuerdo con las fuerzas armadas.  Él y su equipo los acusó de estar involucrados en la desaparición de 43 estudiantes, una de las peores violaciones de derechos humanos en la reciente historia del país.

Su teléfono celular fue infectado en múltiples ocasiones, la más reciente fue el año pasado mientras estaba a cargo de la Comisión de la Verdad del gobierno sobre los secuestros, dándoles a los hackers un acceso ilimitado a toda su vida digital, de acuerdo a cuatro personas que platicaron con él.

Aunque los ataques a Encinas no es algo que México no haya atestiguado.

“Si alguien es cercano al presidente como lo es Alejandro Encinas, entonces se convierte en un objetivo, es claro que no hay control democrático sobre esa herramienta de espionaje”, comentó Eduardo Bojórquez, director de Transparencia Internacional Mexicana, un grupo anti-corrupción.