Diario
Associated Press Joe Biden, presidente de Estados Unidos
Desafiando la gravedad política y las tendencias históricas de mitad de período que han favorecido en gran medida al partido que no está en el poder, los demócratas aseguraron una mayoría mínima en el Senado este sábado por la noche con la reelección de la senadora Catherine Cortez Masto de Nevada. Si bien su margen de control en la cámara seguirá siendo muy pequeño, y muy por debajo de la gran mayoría necesaria para aprobar una legislación importante, constituye un salvavidas para Biden, lo que limita la oportunidad de los republicanos de causar estragos en su agenda o destituirlo a él o a otros miembros de su administración.
Si los demócratas logran retener la Cámara, una posibilidad, aunque remota dado que las carreras no resueltas se inclinan actualmente, sería un verdadero cambio de juego para Biden, lo que podría permitirle impulsar aún más su agenda en la segunda mitad de su periodo. Pero incluso sin eso, el Senado le da un punto de apoyo crítico.
Los demócratas conservarán el poder de confirmar unilateralmente decenas de jueces adicionales designados por Biden. También mantendrán el control de la sala del Senado, lo que les permitirá garantizar que, en caso de que los republicanos ganen la mayoría en la Cámara, cualquier legislación que pueda frustrar la agenda de Biden o dificultar políticamente la vida para él y otros demócratas nunca vea la luz del día en la otra cámara.
Hablando con los periodistas en una conferencia de prensa en Nueva York este domingo, el senador Chuck Schumer, demócrata de Nueva York y líder de la mayoría, desafió a los republicanos a trabajar a su lado para aprobar más de la agenda de Biden. Señaló que ya lo habían hecho este año en algunas piezas legislativas sustanciales.
“El Partido Republicano tiene una opción”, dijo Schumer. “Pueden seguir dejando que MAGA y la extrema derecha los guíe, ése es un camino hacia el fracaso. O el grupo que no es MAGA puede trabajar con nosotros en temas importantes que benefician al pueblo estadounidense”.
Llamó a los resultados de mitad de período "un llamado de atención del pueblo estadounidense" para que los republicanos "dejen de coquetear con la autocracia, dejen de perder el tiempo negando las elecciones y trabajen para hacer algo".