PUBLICIDAD

Estado

Fui una cortina de humo: Javier Garfio

‘No hubiera aguantado cinco años en prisión’

Denuncia exalcalde que fue presionado por Corral para declarar en contra de César Duarte

Heriberto Barrientos
El Diario de Chihuahua

martes, 29 marzo 2022 | 10:46

El Diario de Chihuahua

PUBLICIDAD

Chihuahua.– “No me arrepiento de haber aceptado la culpabilidad ante el juez en el delito de peculado agravado que me fabricaron, porque no hubiera aguantado cinco años en prisión”, justificó el exalcalde Javier Garfio Pacheco.

En conferencia de prensa que ofreció ayer en conocido hotel del centro de la ciudad de Chihuahua, afirmó que hubo una “cortina de humo” en la pasada administración estatal, encabezada por el panista Javier Corral, para detenerlo y exhibirlo como “trofeo político” ante el fracaso por detener y llevar a los tribunales al exgobernador César Duarte.

Cinco años y un día después de que fue arrestado por elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) mientras se dirigía a su oficina, el exedil recordó cómo aquel 27 de marzo de 2017, a escasos cuatro días después del crimen de la periodista Miroslava Breach, fue exhibido y sujeto al escarnio público.

“Cuando fui detenido los policías me anduvieron paseando por varias calles y no sabían qué hacer conmigo, hasta que me llevaron al C-4. Me trataron como un vil delincuente, cuando regresé a mis actividades profesionales tras haber dejado la alcaldía”.

“La acusación que me fabricaron fue por un asunto de la Coesvi, en el que supuestamente yo participé como vocal en una asamblea para vender unos terrenos en el ejido Labor de Terrazas a un precio mucho menor, pero nunca hubo una asamblea, nunca existió”, dijo.

‘Firmaba muchos documentos’

Sobre la firma suya que aparece en el acta de la asamblea, no precisó en qué manera la colocó ahí, pues dijo: “firmaba muchos documentos”. 

Indicó que el 17 de mayo de 2017 lo fue a visitar un licenciado –cuyo nombre no reveló– al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Aquiles Serdán, hasta la celda donde se encontraba preso, y le dijo que había otra investigación en su contra.

“Me dijo que como yo era muy amigo del exgobernador, ‘tienes que atestiguar todos los delitos que hay en contra de Duarte’, a lo que le dije que no sabía, pero me amenazaron que tenía que decirlo. Si me negaba me dijeron que entonces iba a permanecer en prisión en todo el Gobierno de Javier Corral”, expresó Garfio.

El exalcalde narró que posteriormente, en el mes de agosto de ese año 2017, le llegó una segunda visita inesperada al Cereso, pero de otro abogado, quien se comportó grosero y prepotente y le insistió en que tenía que atestiguar en contra del exgobernador Duarte.

“Yo le dije ‘no tengo elementos, ni conocimiento de algún caso de corrupción’, le respondí, pero a los días regresó esa persona, y en ese momento había otros detenidos que me decían que no soportaban la prisión e iban a decir lo que quisieran en el Gobierno de Corral con tal de poder salir”.

“Tras pensarlo muy bien, y por la delicada situación de mi salud se las puse fácil, les dije entonces que pusieran en una declaración lo que ellos quisieran. Ese abogado escribió la declaración, misma que capturaron y la firmé”.

“Todavía a los pocos días regresó ese mismo abogado y me dijo que los jefes dijeron que tenía que ser más contundente en la declaración y que mi salida de la cárcel iba a ser con una sentencia de tres años, ahí esperé hasta que pude salir de prisión, pero me enfrenté al escarnio público junto a mi familia”, señaló Garfio.

En su narrativa, Garfio mencionó que, sobre los 16 terrenos que le señalaron penalmente, votó a favor de que se vendieran a un menor costo a la familia del empresario Benito Tagle, cuando él se desempeñaba como secretario de Obras Públicas en el sexenio de César Duarte; nunca dejaron de ser propiedad del Gobierno estatal, pues nunca se hizo el movimiento de la traslación de dominio.

En su declaración afirmó que tuvo que autodeclararse culpable del delito de peculado agravado ante el juez Octavio Rodríguez Gaytán, para tratar de salir de prisión lo más pronto posible, pues ya no aguantaba más la cárcel.

“Lo peor que puede existir es la cárcel”, recordó. 

Asimismo, dijo que esperaba que el exgobernador César Duarte, quien está próximo a ser extraditado a México, pueda considerarlo todavía su amigo.

Busca limpiar su nombre

Javier Garfio enfatizó que buscará limpiar su nombre a través de un proceso judicial, toda vez que en la actualidad mantiene antecedentes penales y aunque cumplió su condena de poco más de tres años en prisión domiciliaria, justificó que lo hizo bajo presión, es decir, de un delito que verdaderamente no cometió.

No precisó si demandará penalmente a Javier Corral, y ante el cuestionamiento que le hizo El Diario en el sentido de si no hubiera sido mejor esperar la resolución de los jueces federales para que le modificaran la medida cautelar de prisión preventiva que tenía, respondió que no, pues ya había llegado a un acuerdo con funcionarios de la pasada administración en el área de la FGE, por lo que uno de esos acuerdos fue precisamente desistirse de esos juicios de amparo.

“Pero la situación ha cambiado, a cinco años de todos los atropellos que sufrí es momento de limpiar mi nombre, porque no hubo tal venta de dichos terrenos, ni yo tuve una participación en eso. Si no aceptaba yo el acuerdo, iba a durar cinco años en la cárcel”, subrayó.

PUBLICIDAD

ENLACES PATROCINADOS

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

close
search