Preocupa a empresarios atención en tercer nivel

La tardanza del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para atender enfermedades de tercer nivel mantiene nerviosos a los patrones, quienes temen que la salud de sus trabajadores empeore por esta situación.

Eduardo Ramos Morán, presidente local de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), comentó que son frecuentes las quejas de empleados por la burocracia que existe en el IMSS en temas como cirugías.

“Las cirugías no se atienden o se están reprogramando y esos son los servicios que de repente ponen nerviosos a los patrones”, expresó.

Ejemplificó el caso de un trabajador de una de las empresas afiliadas a la Coparmex, a quien por tercera ocasión le han reprogramado una cirugía.

“Son cirugías que no son urgentes, pero si no se atendían se pueden convertir en un problema crítico que ponen la vida en riesgo”, dijo.

Agregó que situaciones como ésta han hecho que las personas opten por pagar consultas con médicos particulares y comprar por su cuenta los medicamentos que en muchas ocasiones tampoco están disponibles en las clínicas del IMSS.

“Cada vez hay más personas que prefieren ir con el doctor Simi y comprar medicamentos genéricos, que ir a esperar horas para una consulta en la que al último les salen con que no hay medicinas”, expresó. 

Aunque no especificó cifras, el líder empresarial criticó que la mayoría de las cuotas que aportan los patrones al IMSS se usan para pensiones y jubilaciones de los doctores, en lugar de atención médica.

Ayer, El Diario dio a conocer que cada mes la industria maquiladora aporta al IMSS alrededor 622 millones 558 mil pesos y 657 millones más a prestaciones sociales como Infonavit, Afores, entre otras, de acuerdo a la encuesta de Industria Manufacturera de Exportación del Inegi.

Insumos vitales como jeringas, torundas con alcohol, equipo de venoset, ambu para dar reanimación a los pacientes que están en paro o intubados, camillas, monitores, medicamentos, guantes, pañales y punzocath para canalizar, fueron algunas de las faltantes que denunciaron enfermeros de la Clínica 6 del IMSS en una manifestación del jueves. 

El líder del sector patronal comentó que tras un diálogo con médicos de ese hospital, se le informó que el problema fue resuelto con una compra emergente de insumos y medicinas que se autorizó.

“Ya se normalizó el abastecimiento, según informó personal del propio IMSS”, dijo.

El presidente de Coparmex recordó que hace algunos años ese organismo empresarial realizó una encuesta para medir la calidad de servicio que se ofrece a los afiliados y en aquel entonces la respuesta fue buena.

Sin embargo, el problema se agravó en últimas fechas por la nueva estrategia del Gobierno federal para centralizar la compra de medicamentos e insumos, lo que hace que la repartición de los mismos tome tiempo en llegar a las ciudades que los necesitan.

“No es papelería para las escuelas, son medicamentos que se necesitan para hoy”, expresó.

Ramos Morán dijo que en la visita que el presidente que de la República realizó a Juárez en el mes de enero, se le entregó por parte de Coparmex una propuesta sobre los cambios del Insabi.

En el documento se hacía ver que la cancelación del Seguro Popular generaba incertidumbre en la población, dado que no tenía claro si los pacientes continuarían recibiendo sus tratamientos en el Insabi, aunque hasta la fecha no se les ha dado una respuesta.

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