Olvídate del reflujo

Ciudad de México.- Las enfermedades relacionadas con el ácido gástrico son la principal causa de consulta en gastroenterología. La más común es el reflujo gastroesofágico, pero hay otras dos muy importantes que pueden ser causa de mortalidad: las úlceras gástricas y la infección por Helicobacter pylori.

Cuando se habla de enfermedades relacionadas con el ácido gástrico, la mayoría de la gente piensa en reflujo, pues se calcula que 70 por ciento de la población alguna vez lo experimenta. Pese a su alta prevalencia, se ha minimizado y banalizado; muchas personas lo diagnostican y hasta se aventuran a dar remedios.

El Doctor Luis Raúl Valdovinos, con Especialidad en Medicina Interna, Gastroenterología, Endoscopía Gastrointestinal y Motilidad Gastrointestinal, señala que tener síntomas ocasionales de reflujo no es enfermedad o algo que deba alarmar. El problema, advierte, es cuando los síntomas son recurrentes, más de una vez por semana.

En el manejo de los síntomas ocasionales lo común es el uso de antiácidos en forma de tabletas de bicarbonato de calcio o soluciones que tienen calcio, magnesio o bismuto. El médico alerta que se pueden tomar de forma ocasional, pero no recurrente.

Para tratar enfermedades relacionadas con el ácido gástrico se utilizaban inhibidores H2, como ranitidina y famotidina, hasta que surgieron en los años 70 fármacos más eficaces y con menos efectos adversos: los inhibidores de la bomba de protones, como omeprazol, pantoprazol, entre otros.

Apunta que estos fármacos son bastante útiles pero solo cuando se toman de manera correcta. La desventaja, apunta, es que las indicaciones para tomarlos son muy complejas y terminan por fallar.

Explica, se deben tomar entre 30 y 60 minutos antes del desayuno, que debe ser de 400 kilocalorías, porque solo así se activa la bomba que produce ácido en el estómago y se puede dar su debida absorción. Si no se dan estas condiciones, el medicamento no funciona. Además, comienza a actuar de tres a cinco días de la correcta ingesta.

La alternativa: bloqueadores de ácido competitivo de potasio

Estos nuevos fármacos, conocidos como P-CAB, han revolucionado el tratamiento de las enfermedades relacionadas con el ácido gástrico, comenta el Doctor Valdovinos, porque no necesitan que las bombas estén activas. Es decir, funcionan de manera correcta sin importar si se toman en ayuno, después de comer o entre comidas, y no requieren seguir ciertos pasos.

Otra gran ventaja que observa este especialista es que no necesitan pasar días para que los fármacos tengan su máxima función. “Desde la primera dosis, a los 30 minutos, tienes el efecto completo en la inhibición del ácido gástrico”, precisa.