Aloja Los Pinos a personal de Salud

Ciudad de México— Parte de la antigua residencia presidencial mexicana de Los Pinos, que fue transformada en un espacio cultural por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, comenzó a funcionar el lunes como zona de alojamiento y descanso para el personal de la salud que trata casos de Covid-19 en la capital.

Zoé Robledo, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), explicó que en un primer momento este espacio será ocupado por 58 personas, pero que podría habilitarse hasta para un centenar. Según una encuesta realizada por el IMSS entre sus trabajadores, el 86% del personal médico y de enfermería dijo estar interesado en un área de hospedaje y descanso para evitar los traslados, tener más seguridad –ya que muchos han sido objeto de acoso– y proteger a familiares de eventuales contagios, explicó Robledo.

En Ciudad de México, el Gobierno ya habilitó 154 hoteles con 2 mil 560 habitaciones para estos profesionales, por lo que la decisión del Gobierno federal es simbólica: Los Pinos ha sido un lugar tradicionalmente vinculado con los lujos de los mandatarios.

Con más 24 mil 905 contagiados oficiales y 2 mil 271 muertos, México está comenzando la fase más dura de la epidemia, sobre todo en lugares como la capital y sus alrededores, la ciudad fronteriza de Tijuana en Baja California y los estados de Sinaloa y Quintana Roo y Tabasco, donde a partir de esta semana comenzará a operar el plan de emergencia de las fuerzas armadas.

En América Latina se han registrado casi 228 mil contagiados y más de 12 mil 700 muertos, con Brasil a la cabeza de las infecciones y decesos.

El coronavirus ha infectado a más de 3.5 millones de personas y causado la muerte a más de 250 mil en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.

En la mayoría de la gente este virus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas, pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.