Robo de luz provoca cientos de incendios

Las conexiones irregulares de luz en las viviendas causan cientos de incendios al año, indican estimaciones de la Dirección General de Protección Civil.

De acuerdo con Roberto Briones, director general de esta dependencia, la mayor parte de los siniestros que se registran en los domicilios de esta ciudad –685 este 2022– derivan de problemas en la calidad de las instalaciones eléctricas, entre las que hasta cuatro de cada 10 diez incluyen una conexión irregular al poste de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“Muchas veces en los incendios está el cable clavado en las vigas de madera y sin la caja de fusibles, hace sobrecarga, se calienta y viene el incendio, sin contar que muchas veces encontramos también ‘diablitos’, que tienen su medidor pero atrás del medidor ya le hicieron un truco para pagar menos energía eléctrica y se conectan directamente del poste de la Comisión Federal de Electricidad y nos origina, otra vez, el cortocircuito y por ende el incendio”, dijo Briones.

“Por mala instalación eléctrica, un 60 por ciento (…) y el otro 40 por ciento sería por conexiones irregulares desde el poste de la CFE o uso de diablitos”, agregó.

Este medio difundió ayer que el robo de este tipo de energía en esta frontera representa pérdidas económicas para la CFE de hasta 384 millones de pesos, y que tan sólo en lo que va de 2022 se han detectado 58 mil 662 conexiones ilegales en los sectores agrícola, de alumbrado, bombeo, comercial, doméstico e industrial.

“Se estima que la ciudad cuenta con 1.4 millones de usuarios registrados, por lo que los ‘colgados’ representan el 4 por ciento de los beneficiarios”, indicó el reporte.

Desde febrero de 2022, el superintendente de la CFE en esta frontera, Alejandro Hernández, dijo que las conexiones ilícitas se fueron acumulando en la ciudad con el paso de los años y que, luego de un estudio en 2021, la dependencia se propuso regularizar 40 mil tomas para finales de este 2022.

Ayer, ni Hernández ni Víctor Barba, vocero de la CFE en la Zona Noroeste, respondieron una solicitud de información sobre la cantidad de tomas regularizadas.

Lo reportado por el primero en febrero –cuando fue entrevistado en un foro sobre la reforma eléctrica propuesta por el Gobierno federal– agrega que la mayoría de las tomas irregulares se encuentran en fraccionamientos de la zona suroriente de la ciudad, donde abundan las viviendas abandonadas.

“Es población flotante, tenemos muchos domicilios que invaden, visitantes que vienen a trabajar o que vienen de pasada y esos son los que se conectan de manera irregular. Entonces, también hay un tema de tenencia de la tierra y tenencia del inmueble, que es lo que a veces nos limita para poder regularizarlos”, indicó entonces el servidor público.

“Hemos llegado a incendios donde lo primero que hace el Departamento de Bomberos es cortar la energía eléctrica, bajar el medidor, precisamente para que los elementos no vayan a tener una descarga, y sigue dándose la continuidad de la electricidad en el domicilio, ¿por qué? Porque están colgados de manera irregular, también es un riesgo para los bomberos”, agregó Briones.

Otros datos de CFE explican que el robo de energía es la alteración de la infraestructura de esta empresa para la obtención del suministro eléctrico, y que opera en diferentes modalidades, como las conexiones a los cables sin pasar por los medidores, la derivación de carga antes de llegar a éstos o el uso del servicio sin contrato.