Diario
Juárez
viernes, 10 mayo 2019 | 06:00
Ciudad Juárez— Más de mil migrantes son detenidos en promedio todos los días por agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector El Paso, la mayoría a lo largo de los 22 kilómetros que van del cerro de Cristo Rey, en la frontera con Sunland Park, al cruce de los bulevares Juan Pablo II y Francisco Villarreal Torres.
De acuerdo con el vocero de la corporación, Ramiro Cordero, el promedio de detenciones al día en la zona metropolitana de El Paso aumentó de 570 en marzo a 860 personas en abril y a mil en mayo, pero el miércoles aprehendieron a más de mil 500.
Ayer, en un lapso de cuatro horas se observó a entre 500 y 600 migrantes caminando entre el muro y el río Bravo, desde la altura de El Punto hasta la calle Estaño, donde termina la construcción de la valla de acero.
“Queremos agua”, gritaba uno de los migrantes mientras que al ver el final del muro un pequeño centroamericano que caminaba de la mano de un hombre adulto comenzó a gritar junto al río “¡ya llegamos, ya llegamos; ya estamos aquí!”.
Cruzaron en abril 2,464 menores sin compañía
Aunque todos los días se ven familias de migrantes cruzar por la frontera con Ciudad Juárez, ayer se observó a dos grupos grandes, la mayoría con niños.
La caravana de, al parecer, centroamericanos recorrió la frontera de lado estadounidense, desde la altura de El Punto hasta llegar al marcador 14, abajo del puente Lerdo, donde un agente vestido con ropa militar y la bandera de Estados Unidos en el brazo derecho les indicó a través de los barrotes de acero de 6 metros de altura que caminaran hacia el poniente.
Los migrantes corrieron, pero debido a que en el lugar empieza el alambre de púas que colocaron los militares junto al muro, tuvieron que bajar para caminar por el bordo del río. Luego se toparon con otra puerta del muro, donde comenzaron a tocar hasta que los trabajadores les dijeron que continuaran caminando.
Finalmente vieron que el muro terminaba y fue entonces cuando la gente comenzó a gritar que quería agua y el niño emocionado comenzó a celebrar a gritos su llegada a Estados Unidos.
En lo que va del año fiscal 2019 –que comenzó el 1 de octubre de 2018– un total de 101 mil 857 inmigrantes han sido detenidos en el Sector El Paso por la Patrulla Fronteriza (USBP), de acuerdo con datos de la agencia. De esta cifra, 20 mil 428 fueron aprehendidos únicamente en el mes de abril.
De la cifra de abril 10 mil 496 son niños y 9 mil 932 adultos. De estos números, se desglosan la categoría de “adultos solos” con 3 mil 964 aprehensiones y ‘niños sin compañía’ con 2 mil 464 en el pasado mes, según datos de la agencia.
“Le hacemos como podemos –para trasladarlos de la frontera a su procesamiento– tenemos un par de camiones, utilizamos vans, trocas, camiones, los encaminamos si se puede”, confesó un agente de la Patrulla Fronteriza.
Dijo que el número de detenciones es “cada vez más alto… nosotros los detenemos y en un promedio de un 10 por ciento la gente dice que viene buscando asilo político, en su mayoría te dicen que quieren una mejor vida”.
El agente de la Patrulla Fronteriza también destacó que “las historias son muy similares. Las historias son iguales para dos regiones completamente diferentes”, pero es muy difícil comprobar el miedo o la violencia para lograr el refugio en Estados Unidos.
A nivel nacional, 109 mil 144 inmigrantes fueron aprehendidos en abril, incluyendo más de 58 mil familias y 8 mil 800 menores de edad no acompañados, de acuerdo con cifras del Departamento de Seguridad Nacional.
Aproximadamente una quinta parte de esas detenciones ocurrió en El Paso.
“La situación aquí en el Sector El Paso sigue como ha estado en los últimos meses, sin precedentes”, dijo Cordero.
Agentes ‘niñeras’
En la reunión ante el Senado, Carla Provost, jefa de la Patrulla Fronteriza, dijo que se ha tenido que relevar a agentes de sus labores para cuidar de niños que llegan solos a la frontera. Incluso mostró a los senadores fotografías de agentes alimentando a bebés.
En El Paso no ha sido la excepción. La escasez de oficiales al frente de la seguridad en la frontera, así como la inmensa llegada de menores con y sin compañía, ha representado una ardua situación para los agentes.
“Esto es una situación caótica para la seguridad fronteriza ya que muchos de los agentes han sido reasignados a labores de transporte, resguardo de menores, escoltas en hospitales, entre otras funciones. La situación es grave”, manifestó Cordero.
Hace un par de meses, aproximadamente, un menor de tan sólo 2 años llegó solo a El Paso, recordó el vocero.
De acuerdo con Cordero, una mujer comentó que un “coyote” en Juárez le había entregado al niño. “Nos dijo: Aquí está este niño, pero no es mío”, expresó.
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