Amenazas y violencia en el matrimonio, antecedentes de intento de feminicidio

Ciudad Juárez.- Una amenaza previa por llamada telefónica, la presencia de testigos durante el ataque y las pruebas de un matrimonio fallido y con violencia familiar fueron los factores que llevaron a un juez de control del Distrito Judicial Bravos a vincular a proceso a Inocente G. G. como presunto responsable de atropellar a su expareja (aún esposa).

La continuación de audiencia inicial para Inocente G. G. tuvo lugar ayer a las 3:30 de la tarde en la sala 15 de la Ciudad Judicial.  La presidió el juez de control Rigoberto Flores Gómez.

El hombre llegó aún con pantalón de mezclilla y una camiseta gris de manga larga que traía gorro o cuello (se notaba que lo habían cortado con tijeras de manera descuidada). Su ojo izquierdo estaba morado, y el derecho rojo como recuperándose tras golpes en la cara. Una férula en su pie y tobillo derechos lo hacían cojear a su entrada a la sala. 

La audiencia inició. La agente del Ministerio Público reiteró su solicitud de vinculación a proceso. Según la información preliminar que reunió la Fiscalía de Distrito Zona Norte para poder acusar formalmente a G. G., el 17 de marzo a las 3:30 de la tarde aproximadamente en el cruce de las calles Zihuatanejo y Velarde en la colonia Galeana, el hombre embistió con su automóvil Chrysler de cuatro puertas azul a Leticia M. R., en un intento por asesinarla. 

Tras el hecho, vecinos del sector hicieron el arresto ciudadano del presunto responsable hasta que llegó la Policía Municipal y lo aprehendió formalmente. 

Leticia fue trasladada luego a un hospital público del IMSS en la ciudad, hasta donde acudieron agentes del Ministerio Público para tomar su declaración inicial y pedir la valoración oficial de sus lesiones.

La víctima identificó plenamente a su presunto agresor, su expareja Inocente G. G., con quien formalmente sigue casada, pero que llevaban separados un tiempo.

Análisis periciales del estado de salud de la mujer señalaron que las lesiones que presenta pudieran llevar a la amputación de la pierna de la mujer, dada la gravedad de la herida; que existe un riesgo de muerte, de choque hipovolémico (falla del cuerpo por pérdida de sangre) o un choque séptico (falla del cuerpo por contaminación interna por bacterias, virus u hongos).

G. G. también fue identificado por la hermana de la víctima, así como por un varón de iniciales J. C. V., actual pareja de Leticia. Ambos dieron, además, un relato de los antecedentes de violencia familiar en el matrimonio fallido que terminó en el ataque con el automóvil. 

Las declaraciones de Leticia y su hermana coincidieron en otro punto: el 15 de marzo, Inocente G. G. le llamó para amenazarla diciendo que en caso de verla le “aventaría” el carro para matarla. La víctima no denunció en su momento. Solo dos días duró la amenaza vigente antes de cumplirla.

En dichos antecedentes se basó la solicitud de vinculación, y la defensa, sin pruebas, testigos ni alegatos adicionales, dejó a consideración del juez la decisión “por estrategia defensiva”. 

Previo a su decisión, el juez preguntó a G. G. si tenía algo que añadir. “No, gracias”, respondió.

Para el juez, las pruebas fueron suficientes para considerar, por ahora, la probable responsabilidad como autor del delito de feminicidio agravado en grado de tentativa a Inocente G. G., y descartó el delito de lesiones, porque según la jurisprudencia mexicana son delitos “de resultado”, que no pueden coexistir.

“Un vehículo utilizado de esa manera es un arma mortal”, dijo la autoridad judicial antes de exponer su veredicto.

Hay fundamentos, señaló, para considerar que hubo un intento de feminicidio porque intentó matar a una mujer con la que tiene una relación matrimonial y con la que hubo antecedente de violencia, y el delito lleva penalidad agravada puesto que existía dicha relación y estaba presente la nueva pareja de la mujer al momento de la agresión.

La audiencia tomó 28 minutos para que llegara al auto de vinculación a proceso contra el presunto victimario, quien permanecerá en el Centro de Reinserción Social número 3 de esta ciudad como medida cautelar, al menos durante los próximos dos meses, que fue el plazo para el cierre de investigación complementaria fijado con el juez, en el cual la Fiscalía deberá realizar el rastreo de huellas y sangre en el vehículo, un peritaje de la evolución de la salud de la víctima y un protocolo de riesgo en pareja.