Netanyahu mantiene la ventaja en la elección israelita

Jesuralén.— La alianza de derecha de Benjamin Netanyahu podría ganar por una estrecha ventaja en la quinta elección de Israel en menos de cuatro años, según sugieren las encuestas de salida de este martes por la noche, dándole la oportunidad de regresar al poder al mando de uno de los gobiernos más de derecha en la historia israelita.

Tres encuestas de salida de una televisora indicaron que el partido de Netanyahu, Likud, podría terminar en primer lugar y que su bloque de derecha es probable que pueda formar una estrecha mayoría en el Parlamento.

Sin embargo, las encuestas de salida en Israel se han equivocado anteriormente, particularmente en las competencias cerradas —ya que exageraron el eventual conteo de Netanyahu en la última elección, en marzo del 2021.

Los resultados más claros podrían surgir hasta el miércoles por la mañana, y las cifras finales serán anunciadas hasta el viernes. A los líderes del partido les pedirán que nominen a un primer ministro hasta la próxima semana.

Si el bloque de derecha termina con una estrecha victoria, podría permitirle a Netanyahu, que es el primer ministro de más edad que ha servido a Israel, que regrese al poder aun cuando enfrenta un juicio por cargos de corrupción.

El bloque de Netanyahu incluye una alianza de extrema derecha que busca cambiar radicalmente el sistema judicial de Israel, dar por terminada la autonomía palestina en partes de la ocupada Cisjordania y legalizar una forma de corrupción de la que está acusado de cometer Netanyahu.

El bloque también incluye dos partidos ultra-ortodoxos que se oponen a la secularización de la vida pública de Israel.

Una victoria de Netanyahu también podría bajar la última cortina de uno de los gobiernos más inusuales de Israel: la diversa alianza del primer ministro Yair Lapid que consta de ocho partidos, que unieron a los contrincantes políticos de la derecha, izquierda y centro e incluyeron el primer partido independiente árabe que se une a una coalición gobernante israelita.

Por primera vez desde el 2019, el país podría ser gobernado por una mayoría parlamentaria formada por un solo bloque alineado ideológicamente —reduciendo el riesgo de una lucha interna de la coalición y la posibilidad de que haya otra elección anticipada.