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Internacional

Estos son los probables favoritos para reemplazar a Liz Truss

Miembros conservadores actuales o anteriores del gabinete, son vistos como candidatos para ser el próximo primer ministro de Gran Bretaña

The New York Times

jueves, 20 octubre 2022 | 08:36

The New York Times

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Londres.- Los principales candidatos para reemplazar a Liz Truss como primera ministra de Gran Bretaña incluyen figuras clave de su gabinete, así como antiguos rivales por el liderazgo del Partido Conservador. Algunos analistas incluso han especulado que Boris Johnson, quien renunció como primer ministro en el verano, podría regresar.

El jueves, Jeremy Hunt, quien fue nombrado ministro de Hacienda la semana pasada y se le atribuye haber restaurado cierta estabilidad económica, dijo que no se postularía para líder del partido, informó la BBC.

Aquí hay un vistazo a algunos de los posibles contendientes:

Penny Mordaunt, líder de la Cámara de los Comunes

Mordaunt, de 49 años, se convirtió en la líder de la cámara baja del Parlamento británico después de emerger brevemente como contendiente en la competencia por el liderazgo del Partido Conservador de este verano, ganada por Truss. En ese momento, el rápido ascenso de Mordaunt alarmó a algunos críticos, quienes dijeron que no había sido probada y apenas calificada para primer ministro.

Hija de un paracaidista que sirve en la Royal Naval Reserve, Mordaunt fue secretaria de defensa durante dos meses y medio en 2019 y ocupó un puesto menor en el gabinete a cargo del desarrollo internacional.

Rishi Sunak, excanciller derrotado por Truss

Sunak, de 42 años, se desempeñó como Ministro de Hacienda bajo el Primer Ministro Boris Johnson y durante un tiempo fue visto como su sucesor más probable.

Pero terminó segundo en la contienda por el liderazgo del partido detrás de Truss, obstaculizado por su asociación con el gasto de la era de Covid, los aumentos de impuestos y la crisis del costo de vida de Gran Bretaña, así como su participación en la expulsión de Johnson, una expulsión que muchos miembros del partido llegaron a decir que se arrepienten.

Sunak, hijo de inmigrantes indios educado en Oxford y Stanford, ha sido presentado como un ejemplo de una Gran Bretaña multiétnica y más moderna. Pero dos escándalos este año empañaron su reputación.

Se descubrió que su rica esposa había reclamado un estatus fiscal que le permitía evitar pagar impuestos sobre algunos de sus ingresos. Luego se reveló que el Sr. Sunak siguió teniendo una Green Card, lo que le permitió vivir y trabajar en Estados Unidos durante meses después de convertirse en canciller.

Ben Wallace, secretario de defensa

Se decía que Wallace, de 52 años, exsoldado, era una de las principales opciones entre los miembros del Partido Conservador para suceder a Johnson. Pero decidió no buscar el cargo de primer ministro, reconociendo a The Telegraph en septiembre: “No lo quería lo suficiente”.

Dijo que estaba apoyando a Truss en la contienda del partido, en parte porque ella había prometido aumentar el gasto militar. Ha sido un firme partidario de Ucrania en medio de la invasión de Rusia y viajó a Kiev en septiembre para reunirse con su homólogo ucraniano.

Wallace, que se opuso al Brexit, se desempeñó anteriormente como ministro de seguridad y delitos económicos.

Suella Braverman, exministra del Interior

Braverman, de 42 años, es vista como una candidata sombría. Ella es una línea dura que se mostró hostil a los movimientos para permitir que más inmigrantes ingresen a Gran Bretaña, y anteriormente se desempeñó como fiscal general.

Truss la despidió como secretaria del Interior el pasado miércoles después de reconocer que era culpable de una violación técnica de las reglas de seguridad del correo electrónico. Pero en su carta de renuncia, dijo que tenía “preocupaciones sobre la dirección de este gobierno”, acusándolo de incumplir las promesas a los votantes y, en particular, de no frenar la inmigración.

Braverman es hija de inmigrantes de Kenia y Mauricio. El año pasado, cuando era fiscal general, ocupó los titulares cuando se convirtió en la primera funcionaria del gabinete de Gran Bretaña en tomar una licencia de maternidad pagada sin renunciar a su cargo, luego de que el Parlamento cambiara una ley que le obligaba a hacerlo.

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