Sube demanda de píldoras abortivas en EU tras revés de Corte

Washington DC.- Menos de 48 horas después de que la Corte Suprema de Estados Unidos dijera que los estados podrían prohibir el aborto, los proveedores de atención médica han notado un aumento en el interés por medicamentos de control de natalidad, anticoncepción de emergencia y píldoras abortivas.

Especialmente en los nueve estados que hasta este domingo han prohibido el procedimiento el domingo, las mujeres parecían temer un acceso más restringido a los recursos de planificación familiar y algunas estaban acumulando opciones.

El aumento de la demanda refleja una creciente preocupación de que el fallo de la Corte precediera a un esfuerzo más amplio para evitar que las estadounidenses determinen por sí mismas si quedar embarazadas y cuándo.

Después de que Katie Thomas, de 42 años, se enteró de que el aborto sería ilegal en Arkansas, compró pastillas abortivas para su hija de 16 años.

"Solo la idea de que algo le suceda a mi hija, ya sea por la fuerza o por elección propia, y que haya un embarazo no deseado, quiero poder manejar eso", dijo Thomas. "Si necesito hacer eso por mi cuenta, entonces lo haré".

Thomas, de Little Rock, dijo que ya se había estado abasteciendo de Plan B, un anticonceptivo de emergencia, en caso de que su otro hijo, de 21 años, y su novia lo necesitaran. El viernes compró aún más.

Abigail Carroll, la fundadora de Abortion Access Nashville, de 22 años, dijo que algunas mujeres jóvenes estaban almacenando el medicamento Plan B, pero advirtió a las personas de no contribuir a una escasez en los estantes de las farmacias para que aquellas que actualmente necesitan las píldoras puedan obtenerlas.

Planned Parenthood Southeast en Atlanta está recibiendo más llamadas de lo habitual de personas preocupadas porque sus opciones en torno al embarazo están disminuyendo, dijo Lauren Frazier, una vocera.

"Quieren saber cuántas píldoras anticonceptivas pueden almacenar", dijo Frazier, quien agregó que recibía también preguntas sobre métodos de anticoncepción de emergencia, vasectomías y ligaduras de trompas.

Incluso antes del fallo de la Corte Suprema, las píldoras abortivas ya se estaban volviendo más populares. En 2020, más de la mitad de los abortos en Estados Unidos fueron realizados con medicamentos, según un informe del Instituto Guttmacher, que apoya el acceso al aborto.

Y se espera que ese número aumente.

Es probable que a los estados conservadores que han prohibido el aborto con medicamentos les resulte difícil hacerlo cumplir: muchas pacientes eligen el procedimiento porque es menos costoso, menos invasivo y ofrece más privacidad que los abortos quirúrgicos.

Kiki Freedman, directora ejecutiva de Hey Jane, una empresa emergente que proporciona abortos por telemedicina a mujeres en seis estados, dijo que la demanda de pacientes se duplicó después de la decisión de la Corte de anular el fallo Roe v. Wade que había hecho constitucional la interrupción del embarazo.

El tráfico a su sitio web el viernes fue 10 veces mayor de lo habitual.

La decisión judicial también pareció impulsar el interés en los métodos anticonceptivos reversibles de acción prolongada, como los dispositivos intrauterinos.

Un fenómeno similar ocurrió después de que Donald Trump fuera elegido Presidente en 2016, según un estudio de 2019 publicado en JAMA Internal Medicine. El estudio no evaluó la motivación de las personas que se implantaron un DIU en ese momento, pero había una preocupación de que las mujeres pudieran perder el acceso a los métodos anticonceptivos después de que Trump prometiera derogar la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, conocida como ObamaCare, durante la campaña electoral.

El viernes, una manifestante en Nashville, Maria French, dijo que recientemente había reemplazado su DIU por temor a perder el acceso a los métodos de anticoncepción. El aborto sigue siendo legal en Tennessee, pero con el fallo el estado podría prohibir la interrupción del embarazo en los próximos 30 días.

"Fui y compré uno nuevo porque vi esto en las noticias y decidí que era demasiado aterrador para mi gusto", dijo French, de 24 años.

"No quería dejar que el mío (el DIU) expirara y entonces necesitara un aborto".