Ordena Corte a abogado de Trump entregar registros sobre caso de Mar-a-Lago

Washington.- Un tribunal federal de apelaciones dictaminó este miércoles que un abogado que representa al expresidente Donald J. Trump en la investigación sobre su manejo de material clasificado tenía que responder las preguntas de un gran jurado y entregar a los fiscales documentos relacionados con su trabajo legal.

El fallo de la Corte de Apelaciones para el Distrito de Columbia fue una victoria para el fiscal especial que supervisa la investigación y siguió al intento de Trump de impedir que el abogado, M. Evan Corcoran, entregara lo que probablemente sean docenas de documentos a los investigadores.

La pelea detrás de escena arrojó nueva luz sobre los esfuerzos de los fiscales para reunir evidencia sobre si Trump cometió un delito al desafiar los esfuerzos del gobierno para recuperar materiales clasificados que tomó después de dejar la Casa Blanca.

El litigio, que se llevó a cabo a puerta cerrada, se centra en si los fiscales pueden obligar a Corcoran a proporcionar información sobre quién sabía qué sobre la presencia continua de material clasificado en Mar-a-Lago, la residencia de Trump y club privado en Florida, después de que el gobierno exigiera su devolución la primavera pasada.

En particular, los fiscales se han centrado en un documento que Corcoran redactó la primavera pasada que indica que se había realizado una "búsqueda diligente" en Mar-a-Lago y que no quedaba más material clasificado allí, una afirmación que se probaría falsa. Los fiscales han estado tratando de saber qué sabía Trump sobre esa declaración, según personas informadas sobre el asunto.

El caso involucra un acto de equilibrio entre el privilegio abogado-cliente, que generalmente protege a los abogados de divulgar comunicaciones privadas con sus clientes al gobierno, y una disposición especial de la ley conocida como la excepción de delito-fraude. Esa excepción permite a los fiscales romper el privilegio abogado-cliente cuando tienen motivos para creer que se ha utilizado asesoramiento legal o servicios legales para promover un delito, generalmente por parte del cliente.

La disputa comenzó el mes pasado cuando la oficina del abogado especial, Jack Smith, trató de romper las afirmaciones de privilegio abogado-cliente que Corcoran y Trump habían hecho en la investigación de documentos. En una comparecencia inicial ante un gran jurado que investigaba el caso, Corcoran había afirmado el privilegio como una forma de limitar el alcance de las preguntas que tendría que responder, así como la cantidad de registros legales que tendría que entregar.