'No quiero morir', dicen solicitantes de asilo que enfrentan deportación en EU

Nueva York.- Indra Sihotang se encontraba desesperado por quedarse en Nueva York.  Estando a minutos de ser deportado a Indonesia, este padre de 52 años se aferró a la silla en el que estaba sentado en el Aeropuerto Internacional Kennedy, luchando contra cuatro oficiales de inmigración que trataban de levantarlo.

Al final de la confrontación, su rostro se encontraba sangrando y amoratado.  Sin embargo, ni Sihotang ni otro inmigrante que estaban bajo la custodia de los oficiales y que observó los hechos, les permitieron abordar el avión debido a que el piloto dijo estar preocupado por la seguridad.

“Estoy tratando de explicarles que las condiciones que hay en mi país son muy malas”, dijo Sihotang.  “Ya les dije que no quiero morir allá”.

Sihotang perdió su lucha para recibir asilo en Estados Unidos hace una década, una decisión que no apeló debido a que a él y miles más quedaron protegidos temporalmente de la deportación por la administración Obama.

Días después de haber asumido la presidencia, Trump revocó esa protección, lo cual hizo que Sihotang y miles de otras personas que solicitaron asilo fueran inesperadamente elegibles para ser deportadas, aunque muchos no se dieron cuenta.

Los agentes de inmigración han estado especialmente activos en la Ciudad de Nueva York.  La deportación de inmigrantes que no tienen antecedentes penales, incluyendo a los que buscan asilo y que cuentan con órdenes de deportación que datan de años o décadas, aumentó a 1 mil 144 en el 2018, en comparación con los 313 que se registraron en el 2016, lo cual representa un incremento del 266 por ciento, de acuerdo a un reporte reciente del contralor del ayuntamiento.