Muertes en prisiones de EU aumentaron casi un 50% durante pandemia

Washington.- Las muertes en prisiones estatales y federales en todo Estados Unidos aumentaron casi un 50 por ciento durante el primer año de la pandemia, y en seis estados se duplicaron con creces, según los primeros datos completos sobre muertes en prisión en la era del Covid-19.

El tremendo salto en las muertes en 2020 fue más del doble del aumento en Estados Unidos en general, e incluso superó las estimaciones del aumento porcentual en los hogares de ancianos, uno de los sectores más afectados en todo el país. En muchos estados, según mostraron los datos, las tasas altas continuaron en 2021.

Si bien hubo amplia evidencia de que las prisiones eran puntos críticos de Covid, un examen de los datos realizado por The New York Times subrayó la rapidez con que el virus arrasó las instalaciones abarrotadas y cómo se combinaron una población de reclusos que envejecía, una escasez de personal correccional y personal médico mal equipado, hicieron que los presos fueran especialmente vulnerables durante la peor crisis de salud pública en un siglo.

“Hay tantos que fallecieron por no recibir la atención médica que necesitaban”, dijo Teresa Bebeau, cuyo amigo encarcelado murió por complicaciones de covid y cáncer en Carolina del Sur. “La mayoría de estas personas no entraron allí con sentencias de muerte, pero se están muriendo”.

Las infecciones por covid impulsaron los totales de muerte, pero los reclusos también sucumbieron a otras enfermedades, suicidio y violencia, según los datos, que fueron recopilados por investigadores de la facultad de derecho de la Universidad de California en Los Ángeles, y brindan una visión más detallada y precisa de las muertes en los sistemas penitenciarios durante la pandemia que los esfuerzos anteriores.

En total, al menos 6 mil 182 personas murieron en las cárceles estadounidenses en 2020, en comparación con las 4 mil 240 del año anterior, incluso cuando la población carcelaria del país se redujo de más de 1.4 millones a alrededor de 1.3 millones.

Varios de los estados con las tasas de mortalidad más altas en 2020 tenían un historial de muertes en prisión elevadas, incluidos Alabama, Arkansas, Carolina del Sur y Virginia Occidental. Los investigadores dijeron que las altas cifras (96 muertes por cada 10 mil prisioneros en Virginia Occidental, más que en cualquier otro estado) se derivan de las largas sentencias, las duras condiciones y la salud pública relativamente deficiente en general.

Chrysti Shain, portavoz del Departamento Correccional de Carolina del Sur, dijo que la falta de pruebas al principio de la pandemia había contribuido al aumento de las infecciones. “Carolina del Sur ha realizado cambios significativos en sus sistemas de atención médica y de salud mental durante la última década” para mejorar la atención en las cárceles, dijo. Los funcionarios penitenciarios de los otros tres estados no respondieron a las solicitudes de comentarios.