Diario
Estados Unidos
lunes, 24 junio 2019 | 22:49
Durante el fin de semana, la administración Trump en la persona de Jared Kushner, anunció la primera parte del largamente esperado plan para la paz entre los israelitas y palestinos.
Su componente central fue la creación de un enorme fondo de inversión para inducir a los líderes palestinos a entregarse a sus ambiciones nacionales a cambio de la oportunidad de participar en un nuevo boom económico impulsado por el turismo y otras industrias post-modernas.
La administración le llama a esta estrategia “paz para la prosperidad”.
Para poner esto en perspectiva, de hecho no se trata de una enorme inversión, ya que serán 50 billones de dólares en un período de 10 años, divididos inequitativamente entre los territorios palestinos y las naciones de Egipto, Líbano y Jordania.
La mayoría de esa cantidad para la paz no provendría de Estados Unidos, Kushner desea que los aliados de este país, Medio Oriente, Europa y Asia, pongan la mayor parte.
¿Le suena familiar? Tal vez se deba a que casi al mismo tiempo, Trump estuvo circulando una versión del mismo trato --- hagan lo que nosotros queremos y se harán ricos --- con Irán, que acaba de derribar un dron estadounidense.
También es la misma propuesta que Trump le ha hecho muchas veces a Kim Jong Un, lo más reciente fue hace una semana durante una entrevista con George Stephanopoulos de ABC: “Corea del Norte tiene --- casi la misa oportunidad que cualquier otro país no desarrollado de convertirse en un gigante económico”.
Desde el punto de vista de Trump, la extraordinaria ubicación de ese país es un requisito principal para convertirse en un gigante económico, el presidente alabó el potencial que tiene de convertirse en un lugar en donde haya campos de golf de lujo, si Kim deja de fabricar armas atómicas.