Hablan republicanos cada vez más de 'invasión' de inmigrantes

Nueva York.- Un anuncio de campaña del candidato republicano al Congreso de Indiana resume la llegada de migrantes a la frontera con una palabra. Él no lo considera un problema o crisis.

Le llama una “invasión”.

La palabra invasión también aparece en los anuncios de dos republicanos que compiten por un escaño en el Senado de Michigan.

Y también está en la publicidad de una congresista republicana que busca la reelección en la parte central de Nueva York y en la de un subgobernador de Missouri que se postuló a la gubernatura del estado.

En West Virginia, la publicidad de un representante republicano que enfrenta una competencia cuesta arriba para el Senado dice que el presidente Biden “creó esta invasión de migrantes”.

No hace mucho que el término invasión fue mayormente relegado a los márgenes del debate de inmigración nacional.

Muchos candidatos y figuras políticas han tendido a evitar la palabra, que hace eco de la demagogia de los siglos anteriores que se enfocaron en los inmigrantes asiáticos, latinos y europeos.

Pocos republicanos de la corriente principal del partido se atrevían a usarlo.

Pero ahora, la palabra se ha convertido en algo indispensable en la retórica republicana sobre inmigración.

El uso del término en los anuncios televisados de las campañas en el actual ciclo electoral ya eclipsó el total del anterior, según muestra la información, y la palabra aparece en los discursos, entrevistas de televisión y hasta en la legislación propuesta en el Congreso.

El resurgimiento del término ejemplifica el cambio en la retórica republicana en la Era del ex presidente Donald J. Trump y sus simpatizantes de derecha.

El lenguaje, que en algún tiempo se consideraba hostil se ha convertido en algo común, en algunas ocasiones precisamente porque es contrario a las sensibilidades correctas políticamente.

La inmigración se ha convertido en más divisiva, en donde hasta los alcaldes demócratas se quejan del número de migrantes en sus ciudades.

Los demócratas y defensores de los migrantes han denunciado la palabra y su reciente giro dejando de ser un tabú.

Historiadores y analistas que estudian la retórica política han advertido desde hace tiempo que el término deshumaniza a aquellos a los que se refiere y podría desatar la violencia, haciendo notar que ha aparecido en los escritos de perpetradores de masacres en Pittsburgh, Pa., El Paso, Texas y Búfalo, NY en los últimos años.