En un nuevo impulso de vacunación, Biden se apoya en su 'cuerpo comunitario'

Filadelfia— Solo un grupo de personas había visitado el sitio de vacunación de su comunidad en busca de una primera vacuna contra el coronavirus el lunes pasado, cuando el doctor Ala Stanford, un cirujano pediátrico local, aprovechó una apertura inesperada.

Al otro lado de la calle del estacionamiento de la iglesia donde se había instalado, una funeraria estaba llevando a cabo un trío de servicios, incluido uno para una víctima de Covid-19. Se burló de los nuevos volantes y luego los entregó a la funeraria. Por la tarde, varios trabajadores e invitados habían cruzado la calle para vacunarse, incluido Justin Larkin, un asistente de funeral que extendió el brazo para recibir la vacuna de Johnson & Johnson de dosis única y luego regresó apresuradamente a su trabajo.

La escena, en Victory Christian Center en el suroeste de Filadelfia, subrayó lo que la administración Biden ha llamado una nueva fase de su campaña de vacunación.

El gobierno federal ha establecido sitios de vacunación masiva en los estadios, envió dosis a farmacias y clínicas que atienden a estadounidenses de bajos ingresos y, el viernes, atrajo a los no vacunados con la perspectiva de finalmente poder quitarse los cubrebocas.

Pero con la disminución de las filas, la campaña en muchos lugares ya se ha transformado en un esfuerzo de puerta a puerta y de persona a persona.

"Estamos en la fase de reclutamiento", dijo Stanford. Después de dejar los volantes, se acercó a un hombre que estaba regando su patio trasero adyacente al estacionamiento, suplicándole a través de una cerca de tela metálica. Él declinó.

El Consorcio Black Doctors Covid-19, que dirige el doctor Stanford, es uno de los aproximadamente 11 mil miembros de los que el Departamento de Salud y Servicios Humanos llama su cuerpo comunitario Covid-19, una constelación suelta de voluntarios, corporaciones, grupos de defensa y locales. Las organizaciones que trabajan para vacunar a los estadounidenses a menudo quedan rezagadas por el sistema de atención médica de la nación.

Iniciada el mes pasado, la red opera con la creencia de que una vez que las personas más ansiosas por una vacuna hayan terminado, las que no estén vacunadas preferirán recibir sus vacunas cerca de personas que conocen.