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Washington— Durante más de tres años, fiscales federales investigaron si el dinero que fluyó a través de un banco egipcio pudo haber estado detrás de los millones de dólares que Donald Trump donó a su propia campaña días antes de que ganara la elección del 2016, según le comentaron a CNN múltiples fuentes que tuvieron conocimiento de la investigación, publicó CNN.
La indagatoria, que inició antes y se prolongó hasta después que concluyó la investigación del fiscal especial Rober Mueller, examinó si hubo una contribución ilegal de alguna campaña extranjera.
Esto representa los esfuerzos más prolongados realizados por investigadores federales para entender los vínculos financieros del presidente con el extranjero, y se convirtió en una parte significativa pero oculta de la búsqueda del fiscal especial.
La investigación se mantuvo tan en secreto que en cierto momento, los fiscales cerraron todo un piso de una corte federal en Washington, D.C., para que el equipo de Mueller pudiera luchar por obtener los registros del banco egipcio en un procedimiento a puerta cerrada en la corte, después del citatorio del gran jurado.
La indagatoria, que fue concluida en este verano sin que se hayan fincado cargos, nunca ha sido dada a conocer públicamente.
La fiscalía sospechaba de que pudiera haber un vínculo entre el banco egipcio y la contribución de la campaña de Trump, de acuerdo a varias fuentes, pero nunca pudieron probarlo.
No se sabe si los investigadores obtuvieron evidencia de alguna transferencia relevante del banco egipcio. Sin embargo, múltiples fuentes dijeron que hubo suficiente información para justificar el citatorio y mantener abierta la investigación penal sobre las finanzas de la campaña, después que concluyó la investigación de Mueller.
Entre las principales preguntas que la fiscalía trató de responder y aparentemente nunca lo logró fue si Trump fue apoyado por o se endeudó con un gobierno extranjero.