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Associated Press
El destino de un amplio paquete de rescate del gobierno para apuntalar una economía devastada por la pandemia de coronavirus estuvo en el limbo el domingo después de que los demócratas bloquearon la acción en el Senado, objetando un acuerdo emergente que dijeron que no protegía adecuadamente a los trabajadores ni impuso restricciones suficientemente estrictas sobre empresas rescatadas, publicó CNN.
En una votación procesal que se desarrolló después de tres días de negociaciones rápidas para alcanzar un compromiso bipartidista, los demócratas del Senado registraron su oposición al proyecto de ley, incluso cuando los principales negociadores continuaron luchando detrás de escena para llegar a un acuerdo.
La votación de 47-47 fue un sorprendente revés para un paquete que estaba emergiendo como la mayor medida de estímulo económico en la historia moderna de Estados Unidos, y ahora se espera que cueste 1.8 billones de dólares o más. La Casa Blanca y los legisladores de ambos partidos se preparaban para el caos en los mercados el lunes por la mañana si no llegaban a un acuerdo sobre el enorme plan de rescate del gobierno.
Los republicanos y los demócratas, así como el presidente Trump, han acordado que el plan fue crucial para amortiguar el golpe económico de la enfermedad que se propaga rápidamente, que cerró industrias enteras, obligó a los trabajadores a quedarse en sus hogares y causó estragos en los mercados mundiales. Enviaría pagos directos de mil 200 a millones de dólares de estadounidenses y pondría a disposición de los estados beneficios y ayuda por desempleo adicionales, y otorgaría cientos de miles de millones de dólares para préstamos a empresas.
Pero a medida que surgieron sus bosquejos el domingo, los demócratas denunciaron el paquete como un obsequio corporativo que favorecía a las grandes empresas sobre los trabajadores y no se aseguraron de que las compañías rescatadas no se enriquecieran después de recibir ayuda del gobierno. Los demócratas estaban particularmente indignados por la inclusión de una disposición para dar a la Reserva Federal acceso a $ 425 mil millones que podrían ser apalancados para préstamos a amplios grupos de empresas en dificultades, sin restricciones sobre qué empresas podrían recibirlo o cómo podría usarse.
En una conferencia de prensa el domingo por la noche, el presidente no se comprometió a decir públicamente que no aceptaría dinero de ayuda federal para su negocio familiar, la Organización Trump.
"Aprendí, veamos qué sucede", dijo Trump. "Porque tenemos que salvar a algunas de estas grandes compañías".