¿Por qué no deberías asistir a la cena de Acción de Gracias de este año?

¿Realmente necesita arriesgar tu salud, o la de otra persona, por la satisfacción de una comida compartida y el privilegio de discutir sobre política con tus torpes primos?

Esta es una de las muchas preguntas envueltas en la conversación más amplia a favor y en contra sobre si las familias deberían reunirse este año para Acción de Gracias y Navidades, según publicó Los Angeles Times.

La principal ventaja es clara: usted y sus familiares tendrán la comodidad de estar juntos después de un año miserable. Esa perspectiva seguramente unirá a muchas familias en noviembre y diciembre, especialmente si pueden conducir en lugar de volar.

La gran desventaja, por supuesto, es que podrías infectar a uno o más de tus parientes. O podrían contagiarte. Tal vez tu familia haya tenido suerte hasta ahora, pero el recuento de fallecidos en Estados Unidos superó los 170 mil el 17 de agosto, y esa lista está dominada por abuelos y bisabuelos.

¿Qué tan necesario es este viaje? ¿Qué edad tienen todos los involucrados y qué tan saludables? ¿Cómo se comparan las tasas de infección y muerte entre mi área y mi destino? Recuerda que California tiene más casos de Covid-19 que en cualquier otro lugar de Estados Unidos, y el condado de Los Ángeles tiene más casos que cualquier otro condado de California.

Uno que probablemente no hará un viaje familiar de larga distancia este año es John DiScala, que dirige el sitio web de consejos de viajes JohnnyJet.com. DiScala, que vive en Manhattan Beach con su esposa Natalie, su hijo Jack, de 4 años, y su hija Olivia, de 1, suele visitar a su padre en Florida y a sus suegros en Toronto. Pero ahora…

"Quiero ir a visitar a mi papá, pero él tiene 92 años. Y no puedo arriesgarme a contagiarlo", dijo DiScala. "Es una tortura".

Además, aunque DiScala tiene boletos de avión para visitar a sus suegros en diciembre, también espera cancelar ese viaje.

DiScala no ha abordado un vuelo desde febrero, el período más largo que ha pasado sin volar en su vida adulta.

¿Por qué? Porque DiScala tiene asma y porque está prestando atención a las estadísticas de infecciones y muertes y escucha a los profesionales médicos.

"En este momento, hay más desventajas que ventajas en volar", dijo. "Cuanto más esperemos, mejor podrán los científicos y los médicos averiguar qué está pasando con este virus y cómo tratarlo".

El doctor Henry J. Ortiz, psicólogo del oeste de Los Ángeles, ha llegado a una conclusión similar.

Ortiz y su prometida habían planeado volar a Nueva York este invierno para reunirse con su familia. Ahora, dijo, "hemos estado tristes por el hecho de que es poco probable que lleguemos a Nueva York para las vacaciones de Navidad".

Tal como están las cosas actualmente, ese tipo de vacaciones "para la mayoría de nosotros no es algo inteligente o moral para hacer en este momento", dijo Ortiz. Sin embargo, "las vacaciones son tan significativas para muchos de nosotros que es natural tener muchas emociones y entusiasmos diferentes".

Antes de que alguien se comprometa con un viaje, dijo Ortiz, las familias deben reexaminar la forma en que se comunican y cómo manejan las circunstancias cambiantes.

“Más que nunca, necesitamos desarrollar buenas habilidades de comunicación”, dijo Ortiz. "Necesitamos ser abiertos y honestos entre nosotros sobre lo que es importante y por qué es importante".

El doctor Rubén Hernández-León, profesor de sociología en UCLA y director del Centro de Estudios Mexicanos de la universidad, citó múltiples variables importantes para los mexicanos y mexicoamericanos que están considerando viajar a México durante las vacaciones.

Una incógnita: la frontera, oficialmente cerrada a los viajes terrestres no esenciales desde marzo, aún puede estar cerrada en noviembre y diciembre. Otro: algunos mexicanos y mexicoamericanos pueden estar nerviosos por volver a cruzar a los Estados Unidos bajo la administración Trump.

Mientras tanto, dijo Hernández-León, muchos pueblos rurales mexicanos ya han dicho que preferirían no tener visitantes este año. Eso significaría menos dinero en la comunidad, pero podría reducir la amenaza del virus para los padres ancianos.

“Si las cosas son más o menos como están ahora, mucha gente acabará quedándose”, dijo Hernández-León. "Habrá muchas llamadas telefónicas, muchos videos de WhatsApp".

¿En el caso de Hernández-León? "Yo me quedo. Usualmente mis padres vienen aquí desde Monterrey, o yo voy para allá. Y, por supuesto, esto no va a suceder este año”.

Con California liderando el país con más casos de coronavirus que cualquier otro estado, los expertos en salud pública instan a las personas a posponer los viajes que no son esenciales. Sin embargo, legiones de aerolíneas, hoteles y operaciones de Airbnb, desesperadas por obtener ingresos, estarán felices de recibirlos.