Diario
Opinión
sábado, 08 febrero 2020 | 06:00
• Un amparo quitó la risa en guerra gasolinera
• Le esculcan los tickets al presidente azul
• Campanazo del profe con asamblea
• Rafa en Delicias arropado por duartistas
Hasta un simulacro de viento ligero reaviva el fuego de la guerra gasolinera en Ciudad Juárez. Una contra todas y todas contra una es el escenario. Son razones de muchos pesos las que están en juego; alrededor de mil 200 millones por mes.
Arco mantiene frenada la entrada en función de nueve gasolineras por impugnaciones legales emprendidas por un grupo empresarial también del ramo gasolinero: Total Gas, Super Servicio 4 Caminos, Bip Gas, Grupo Gocalv, Gasomex y Gazpro.
El grupo opositor ha sostenido que las gasolineras de Arco han sido construidas sin cumplir con los reglamentos municipales en materia de seguridad (distancias entre una gasolinera y otra). Hasta ahora la justicia federal les ha concedido la razón.
Así se mantenían las cosas hasta el jueves por la tarde-noche, cuando todo era vida y dulzura al inicio de la sesión de Cabildo. Estaba todo preparado para llevar a cabo cambios justamente en el Reglamento para la Ubicación y Operación de las Estaciones de Servicio para el Municipio de Juárez.
Todos los regidores estaban mejor afinados que una orquesta. Votarían a favor, incluidos los dos corralistas, Enrique Torres y Amparo Beltrán. Serían retirados los candados legales y con ello se supondrían abiertas las puertas para Arco y otras empresas.
El grupo gasolinero opositor no requirió protestas masivas. No necesitó llevar líderes de colonias para gritonear ni a los famosos priistas para el efecto, o los cedepistas ahora del Partido del Trabajo.
Mandaron a una sola persona, a José Ignacio Castillo Ávalos, pero con sendo amparo federal sobre las manos que suplió con creces cualquier manifestación tumultuaria.
Logró que fuera diferido el punto de la orden del día que contemplaba las modificaciones controvertidas. ¿Para cuándo? Tendrán el Ayuntamiento y los de Arco todo el fin de semana para pensarla.
El primero en tiempo es primero en derecho, reza la máxima de los abogados. Resulta que antes de convocar el Ayuntamiento a la sesión para abordar el tema del reglamento citado, Castillo Ávalos ya había hecho lo propio desde el 14 de enero del 2019 cuando presentó su “iniciativa ciudadana” para reformar ese mismo documento para la Ubicación y Operación de las Estaciones de Servicio.
Aparentemente en el Municipio no lo pelaron y nunca resolvieron su solicitud. Ahora deberán hacerlo obligadamente pero a un costo mayor, y no económico, sino el que más cala, el político.
Los gasolineros colocan a la cabeza como responsable de las licencias otorgadas a Arco, nada menos que al gobernador, Javier Corral, a varios de sus funcionarios más cercanos y de pasada a las autoridades municipales juarenses.
Corral pidió ayer que no lo embarren, pero no sólo está embarrado, está bañado de pies a cabeza en el tema. Más que el dinero, en ese terreno es la consecuencia política derivada. Ya está con todo el asunto también en la Ciudad de México con copia directa al presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador.
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La dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN) en el estado sigue buscando cómo neutralizar el avance de su representación en Ciudad Juárez a cargo de Joob Quintín.
Han tomado los operadores de la lideresa Rocío Reza Gallegos como justificación para intervenir los picotones enviados desde la Consejería Jurídica del estado contra Joob con eso de su aparición en revista fifí pero de modestísima circulación.
Pretende el comité estatal rascar a profundidad particularmente en aquellos gastos que si bien es cierto producen algo de morbo porque se trata de comidas y restaurantes algo caros, en el fondo no se consigue con ello aminorar el poder de los locales.
Quintín arrebató la dirigencia municipal a todo el poder representado por el Gobierno estatal y por lo tanto representa un severo peligro para las candidaturas que busquen promover desde ahí.
No será fiscalizándole burritos y galletas como lo consigan, aunque ya tengan los nombres de Ricardo Vega y Edith Herrera como los supuestos auxiliadores en triangulaciones para gastos personales de Quintín Flores.
Es obvia la despreocupación del presidente del comité municipal en ese sentido; incluso ya anda estrenando como secretaria general a la exvisitadora de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y exfuncionaria del Instituto de Transparencia en el estado, Karla Gutiérrez.
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El profesor Martín Chaparro dio un campanazo de viernes por la tarde con una convocatoria a sesión extraordinara del Consejo Estatal de Morena. Citó para el próximo sábado en la capital a las 10:30 horas.
Para que los morenos vean que anda con todo la coordinación de Chaparro con quien ejerce el poder federal en el estado, Juan Carlos Loera, los nombres de los consejeros que avalan la convocatoria lo dicen todo.
Aparecen, además del dirigente por supuesto, Andrés Domínguez y Lizzy Guzmán, que representan a Juárez; Zianya Sandoval, Marcelino Gómez Brenes, Jorge Marave y Hugo González de Chihuahua; así como Omar Holguín, Belisario Rodríguez y Ruth Arvizu por Delicias, Jiménez y Cuauhtémoc.
Ellos y otros más del resto del estado son clara señal del nuevo engranaje morenista en la entidad, con el profe y el superdelegado a la cabeza.
La reunión es de seguimiento a la Asamblea Nacional del 26 de enero, en la que se designó al barzonista Alfonso Ramírez Cuéllar como presidente interino del partido y se le dio calurosa despedida a Yedickol Polevnsky.
El citatorio es parte de la maquinaria que a nivel nacional echó a andar la chihuahuense presidenta del Consejo Nacional, Bertha Luján Uranga, de la mano de Ramírez Cuéllar.
La convocatoria sorpresiva a la asamblea garantiza una semana calientita en Morena, pues de los 90 consejeros que la conforman no todos están bajo el manto del dirigente o de Loera.
Así que vendrán días, de aquí a la extraordinaria, de acuerdos y negociaciones entre los personajes locales del partido. Habrán de definir en cuál bando se alinean. Obviamente los momios están a favor de la paisana.
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Tras su reunión de enero en Juárez, ahora el consejero independiente de Pemex y aspirante a la candidatura morenista de 2021, Rafael Espino, estará en Delicias para hablar de los retos de la Cuarta Transformación en materia energética y de paso de sus expectativas políticas personales.
El chihuahuense que se presume como el más cercano al presidente Andrés Manuel López Obrador encabezará un desayuno en el salón Terranova, con la misma dinámica que tuvo en la frontera. Será una presentación y un amplio espacio de preguntas y respuestas.
Por eso hay temor en las bases morenistas interesadas en conocer a sus aspirantes, pues en el encuentro pasado la gente de Espino dejó fuera a muchos militantes y asignó espacios privilegiados a reconocidos expriistas. Hasta parecía encerrona de la cúpula tricolor de antaño. A ver si lo mismo no se repite en la tierra de los algodoneros.
Pero el encuentro matutino es sólo la versión más pública de la agenda de Espino de la Peña. Más tarde tendrá una comida más selecta y exclusiva.
Al mando del encuentro de mediodía está el duartista Felipe Fájer Mátar, quien fue durante el sexenio pasado presidente de la Junta Municipal de Agua de Delicias, dirigente de la Cámara Nacional de Comercio y frustrado candidato tricolor a una diputación. Perdió con el PRI todo cuando Ricardo Orviz buscaba la alcaldía y Enrique Serrano la gubernatura.
Ya en la noche Espino tiene reservado el Valeria Jardín para una cena nada mal organizada por toda una autoridad política de la región, el profesor Mario Tarango, cuyo largo colmillo lo mantiene como baecista, operador de Armando Cabada y ahora de Rafa Espino. Patricio tiene para eso un adjetivo que es mejor reservar.