Resaltan ventajas de reducir tiempos en cruces de México a EU

Monterrey.- Reducir 10 minutos los tiempos de espera en los cruces fronterizos desde México hacia Estados Unidos facilitaría el cruce adicional de 532 camiones cargados con insumos y mercancías y 5 mil 20 vehículos ligeros cada mes.

Lo que se traduciría en beneficios para ambas naciones, ya que si bien aumentaría de forma anual 312 millones de dólares el comercio de ambas naciones, lo que es menos del 1 por ciento del comercio anual, tendría otros impactos positivos.

Ya que generaría la creación de casi 18 mil 700 empleos en México por mayor demanda de bienes exportables y se podrían reducir los precios finales al consumidor en EU.

Así lo reveló un análisis realizado en conjunto por el Centro Adrienne Arsht para América Latina del Atlantic Council, el Instituto Hunt para la Competitividad Global de la Universidad de Texas en El Paso y El Colegio de la Frontera Norte.

"Las investigaciones muestran que una reducción de 10 minutos en los tiempos de espera podría generar una carga adicional por valor de 26 millones de dólares que ingresa a los Estados Unidos cada mes a través de vehículos comerciales.

"Esto se traduce en más de 312 millones en comercio adicional de México a los Estados Unidos anualmente".

También aumentaría los ingresos laborales por sector en un promedio de 254 mil dólares e impulsaría crecimiento para varios sectores económicos mexicanos, particularmente manufactura, comercio al por mayor y minería, señala el informe.

Para Estados Unidos, disminuir 10 minutos la espera a cada camión en frontera, le permitiría un impacto anual positivo de 5.4 millones de dólares en su economía debido a mayores compras de familias y personas adicionales que crucen desde México.

El estudio agrega que los cruces fronterizos simplificados podrían lograrse a través de mejoras en las prácticas de gestión de fronteras y la adopción de nuevas tecnologías.

Con estos esfuerzos también se puede reforzar la seguridad compartida entre Estados Unidos y México.

Actualmente hay cuellos de botella en los puertos de entrada terrestres a lo largo de la frontera de EU y México, lo que representa un desafío de largo plazo para la integración económica, la resiliencia de la cadena de suministro y la competitividad, señaló el análisis.