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Nacional
viernes, 21 febrero 2020 | 06:00
Ciudad de México— Los presuntos captores y feminicidas de Fátima, de 7 años de edad, ofrecieron 10 mil pesos a policías del Estado de México a cambio de su libertad.
Según reportes extraoficiales, Gladis Giovana Cruz Hernández y Mario Alberto Reyes Nájera ofrecieron 5 mil pesos por cada uno y pidieron tiempo para reunir el dinero.
Sin embargo, los agentes no accedieron y ante la denuncia de una tía de Cruz Hernández fue que los aprehendieron por el delito de cohecho en la comunidad de La Palma, en el municipio de Isidro Fabela.
Fátima fue localizada sin vida al filo del mediodía del sábado 15 de febrero, en el Barrio Los Reyes. Su cadáver estaba envuelto en una bolsa de plástico en un baldío, ubicado en la esquina de Acatla y Canal Seco. Según las autoridades presentaba huellas de abuso sexual, así como de asfixia.
El envoltorio fue descubierto por elementos de la Policía.
Una tía los delató
Irma, tía de Mario Reyes, fue quien llamó a la Policía para que los detuvieran.
Los presuntos feminicidas pidieron a la mujer rentar un cuarto en el Ejido la Palma, sin embargo, Irma y su pareja Mayela observaron el retrato de ambos en los medios de comunicación, motivo por el que les pidieron una explicación.
Mayela narró a Reforma que decidieron llamar a la Policía porque Mario había encargado a Giovana retener a Fátima o de lo contario abusaría de alguno de los hijos de ella.
No fue por dinero
El jefe de la Policía, Omar García, descartó que el feminicidio de la menor haya sido por dinero.
“Es una tragedia verdaderamente grave, no fue por dinero el móvil, de ahí a las intenciones que haya tenido este sujeto, pues en su momento le Fiscalía General de Justicia lo comentará”.
Familiares de la menor pidieron a las autoridades aplicar todo el peso de la ley en caso de comprobar la responsabilidad de Giovana y Mario.
“Que caiga todo el peso de la ley sobre ellos, porque lo que hicieron fue no una barbaridad, fue algo horrible, con una niña de siete años, con Fátima”, comentó Ricardo Espinosa, tío de la pequeña.